Para rematar, Transparencia Internacional (esa otra organización global mucho más conocida, que exhibe la oscuridad y descomposición gubernamental), en su reciente “ranking” del 2022 le otorgó a nuestro país apenas 31 puntos de 100 a lograr en combate a la corrupción
Habiendo sido dada a conocer en noviembre del 2019, en aquel entonces se anunció un plan de trabajo que se ha implementado sin descanso, guiándose por sus ejes rectores: valores, capacitación, responsabilidad social y profesionalización.
Pareciera ser que a la autoridad federal solo le preocupa reducir al máximo posible la violencia durante la gestión de su administración, sin importarle que la sociedad en su conjunto exija tener resultados más óptimos en el presente, mediano y largo plazo.
El 25 de marzo, el presidente del Club Campestre de Tijuana, Ricardo Martínez Apodaca, dio a conocer que el conflicto jurídico que la administración de Jaime Bonilla Valdez emprendió contra el complejo social y deportivo, concluyó.
El mandato de Jaime Bonilla Valdez se ejecutó entre la simulación y la inestabilidad política y económica, pero sobre todo jurídica. Con el pretexto de ser un gobernador “reformador”, la realidad es que su equipo jurídico intentó jugar con la Constitución y toda la estructura legal de Baja California, sin importarles las consecuencias de sus actos.
La candidata demócrata a la Presidencia de los Estados Unidos, Hillary Clinton, otorgó una entrevista exclusiva a la revista Forbes México, en la que dijo que los líderes mexicanos “deben tomar medidas para fortalecer el Estado de Derecho y la gobernabilidad, para asegurarse de que sus ciudadanos se sientan seguros y confíen en las instituciones […]