Ni los artilugios legales, ni los actos de intimidación impidieron que la base sindical decantara por la plantilla opositora y relegarán al actual dirigente, Manuel Guerrero Luna.
El ex siervo de Bonilla causa un desastre dentro del Sindicato de Burócratas: pese a que mantiene su cargo como diputado, quiere imponer y manejar al próximo líder sindical
Breves intervenciones con cuestionamientos y respuestas generales, es lo que pudo percibirse durante la sesión de la Comisión de Gobernación, Legislación y Puntos Constitucionales, donde algunos legisladores preferían jugar y bromear a poner atención a los señalamientos de los ponentes.
Afirmó que no es ilegal, porque cuenta con el servicio de salud gracias a su esposa, quien es sindicalizada. Confirmó también que su hija tenía dos años laborando sin sueldo en el Sindicato y que podía otorgarse una plaza extraordinaria en común acuerdo con el gobierno.
A partir de este primero de abril, la dos veces legisladora morenista ocupará la Presidencia de la Mesa Directiva del Congreso del Estado durante el siguiente periodo ordinario de sesiones.
Suele suceder que todo dirigente estatal o municipal del Sindicato de Trabajadores Burócratas tiene la creencia que la nómina es de su propiedad, y por lo tanto, tiene la capacidad para “regalar” plazas como le venga en gana, siempre y cuando encuentre la forma de verse respaldado por el patrón.
El candidato a la diputación del Distrito I por la alianza “Juntos Haremos Historia”, Manuel Guerrero Luna, anunció que, en caso de ser electo por los ciudadanos, buscará recuperar los derechos que el Partido Acción Nacional le quitó tras la aprobación de la Ley de Servicio Civil, que modificó una serie de cuestiones mutualistas.