El homicidio contra Jorge Luis Cabrera Vélez, de 30 años, presuntamente a manos de policías municipales de Tijuana, propició que sus familiares exijan justicia y que pidan que la fiscalía haga su parte, que no solo se les separe del cargo.
A 20 años de que fue capturado en Puebla y con una sentencia de 25 años de prisión a cuestas en los Estados Unidos, de la que todavía le falta compurgar 11 años, el narcotraficante Benjamín Arellano Félix, caracterizado por su crueldad y sangre fría para ordenar la muerte de policías y enemigos, ahora pide piedad a la justicia norteamericana, porque ya no puede resistir el encarcelamiento debido a su senilidad y una presunta enfermedad grave.
Luego de que les fuera entregado el cuerpo el día jueves 6 de mayo, familiares y amigos de Jorge Luis Cabrera Vélez se despiden de él en medio de lágrimas, tristeza e impotencia.
Una vez sofocado el incendio, se localizó el cuerpo sin vida de un hombre, mismo que presentaba un impacto en la cabeza producido por arma de fuego, además de quemaduras en el cuerpo.