“El Emperador de Austria pidió al Papa una bendición para sus tropas. Pero Pío X le contestó: ‘Yo bendigo la paz, no la guerra’.”
– Carlos Ros, Edith Stein, Mártir en Auschwitz.
La tecnología digital permite conocer directa y puntualmente las noticias de la destrucción ocurrida en Siria y Turquía. Por ejemplo, a través de la edición de Al Watan, diario sirio online. Los traductores hacen su trabajo automáticamente.
Afortunadamente, las tragedias humanas siguen siendo una oportunidad para ayudar a construir.
Entre los reclamos palestinos contra Israel; lo importante es la colaboración de todos los países del mundo árabe a favor de Turquía, pero especialmente con Siria.
Turquía forma parte de la Unión Europea; Siria es acogida por los poderosos Emiratos Árabes y cercana a Palestina.
A un año de la guerra Rusia-Ucrania, surge en la humanidad la solidaridad con Siria y Turquía a causa de un fenómeno natural: los sismos de 7.6 y 7.7, de los más devastadores en la historia.
Hay un despertar en todo el mundo por lo bueno, por el destino propio y el de los demás. El 2 de septiembre de 2015, en la mayoría de los medios de comunicación internacionales, apareció la conmovedora imagen del niño sirio Aylan Kurdi, ahogado en las playas de Bodrum, Turquía; fue una tragedia a causa del contrabando de inmigrantes que huyen de la guerra en Siria.
En México y en nuestras poblaciones, en medio de simulaciones y preocupaciones de sus familias, el crimen organizado sigue enlutando corazones; y mientras las autoridades reaccionan, organizaciones como las madres buscadoras sacrifican su propia vida con el coraje y entrega por hallar a sus hijos o familiares. Algunas de ellas han sido ultimadas en medio del dolor, por los mismos criminales que hicieron daño a sus hijos. Algo trágico y paradójico.
En todos los niveles hay un exceso de información negativa. Tragedias internacionales, nacionales, regionales y locales. Entre fenómenos naturales y crímenes de toda índole, todo pareciera un callejón sin salida. Pero no se debe ocultar la verdad de lo que ocurre.
Por ahora, los escándalos y venganzas a causa de las ambiciones políticas del ya próximo año electoral 2024, marginarán a segundo plano muchas necesidades reales no resueltas en sexenios, en medio de los histriónicos juicios de quienes se consideran modelo de libertad y justicia. Siempre habrá que esperar e impulsar que ocurra lo mejor para todos, incluso en medio de la indiferencia ciudadana, la gran mayoría que no le interesa participar ni por su propio bien, menos por el bien común.
Habrá que seguir adelante. Que más se puede hacer.
Germán Orozco Mora reside en Mexicali.
Correo: saeta87@gmail.com