No hay área actualmente donde mujeres atentas no manejen liderazgos, y finalmente algo que antes era insólito: tener jefas mujeres, ahora tan natural. Ambos sexos ya nos hemos acostumbrado y se nos hace normal.
Hoy está de moda criticar a los gobiernos pasados, pero los del presente no han resultado eficientes en la administración pública. Serán referencia por la ineptitud y la autopromoción que se hicieron ¿Les sirvió para algo? Lo veremos.
Con su credencial para votar del INE, cada mexicano tiene el poder de elegir a quien crea conveniente. Eso es la democracia: la libertad de escoger a nuestros gobernantes y representantes.
Dicen que no hay plazo que no se cumpla ni fecha que no se llegue. Así, el próximo domingo 2 de junio habrá de llevarse a cabo la jornada electoral mediante la cual decidiremos quién será la o el próximo Presidente de México, senadores, diputados federales, diputados locales, presidentes municipales, síndicos, regidores y gobernadores, en algunos casos.
Tanto la panista Xóchitl Gálvez como la AMLO-morenista Claudia Sheinbaum, predican independencia, libertad y soberanía, pero los hechos -los irrefutables hechos, como decía el gran Lenin- nos muestran que esa retórica es pura verborrea patriotera para cautivar a inocentes. Tanto una como la otra son unas despreciables vendepatrias. A ultranza.
El dirigente nacional del PRD sostuvo un encuentro con candidatos en Tijuana. Xóchitl “es una mujer con muchos tamaños para enfrentar a quien le quiera dar órdenes”, dijo en alusión a la candidata presidencial
De obtener el triunfo, Claudia Shenbaum, prevalecería “una actitud peligrosamente antidemocrática y de sometimiento a las decisiones de quien hoy gobierna”, estimo el ex gobernador de Morelos