Un grupo de comerciantes de diversas zonas de la ciudad, se quejaron se haber recibido notificaciones por parte de la Comisión Estatal de Servicios Públicos, por no cumplir con ciertos requerimientos, sin embargo, muchos de ellos, fueron registros o errores que tuvo la misma comisión.
“Me llegó una notificación de que tenía una multa de 100 UMAS (Unidad de Medida y Actualización) -equivalente a 10 mil 857 pesos-, porque no tenían los comprobantes de que tenía las trampas de grasa de mi negocio, cuando yo tengo todo en regla y me ha costado mucho…
“A mi negocio fueron los inspectores de la CESPT, revisaron que cumpliera con todo, incluso al principio me dijeron que la trampa que tenía era muy pequeña y conseguí otra, y ahora me dicen que perdieron los registros y que debo pagar… fui un idiota por confiar en ellos”, dijo Larry, empresario estadounidense, dueño de un restaurante en Playas de Tijuana.
Así como él, decenas de dueños de negocios, la mayoría de la Zona Centro, acudieron a las oficinas de la CESPT a aclarar su situación ante la paraestatal, pues a decir de los afectados, “agarraron parejo” con todos los locatarios y les pusieron multas de más de 10 mil pesos, por situaciones inexistentes, o errores que ellos mismos cometieron.
“Es como si quisieran sacar dinero de donde sea, y se inventaron cualquier cosa contra los usuarios, a sabiendas que no perdonan nada, en la notificación nos dicen que tenemos 15 días para comprobar que hemos cumplido, pero ¿cómo es posible que ellos no tengan registro del trabajo que ellos mismos hicieron?”, continuó Larry.
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Otra de las usuarias también tenía una notificación por no haber revalidado su registro, sin embargo, pudo escapar de la multa debido a que la Cespt se equivocó de dirección, “sí me quitaron la multa porque comprobé que no era la misma dirección, que ellos se habían equivocado, pero en sí, sí hubieran tenido razón, pues no revalidé el del 2023, que es lo que haré en este momento”, dijo la dueña de un comercio en la Zona Centro.
La recepción de la Cespt, ubicada sobre el bulevar Federico Benítez se encontraba llena de personas que iban a arreglar su situación, de a poco, los empleados iban nombrando los comercios que debían pasar a aclarar su situación, desde cafeterías, restaurantes, salones de eventos, peluquerías, y demás.
Hasta el momento, la Cespt no se ha pronunciado al respecto.
