El presidente del Colegio de Abogados José Luis Molina Magaña, Abraham Montes Zavala, calificó de “insuficiente” el presupuesto que se le asignó al Poder Judicial de Baja California para el próximo año, el cual ascenderá a mil 184.8 millones de pesos.
Montes Zavala planteó que debe brindarse “un presupuesto digno” al Poder Judicial, en aras de que pueda estar en condiciones de resolver sus funciones básicas, puesto que, si bien hubo un incremento en el salario de los secretarios y actuarios, se excluyeron a los jueces quienes no han tenido incremento salarial en 18 años.
Una de las propuestas, explicó, es que el Poder Judicial cuente con un porcentaje fijo, del 4% del presupuesto estatal, para poder enfrentar las necesidades que tiene el Poder Judicial en el estado. Lo cual también ayudaría a la autonomía de ese poder, según dijo Montes Zavala.
“Se ha planteado a la gobernadora que se otorgue el presupuesto del 4% al Poder Judicial de Baja California y que se siga pugnando porque así sea, que no cesen en las demandas en este sentido, o bien, otra vía es que lo pueden judicializar a través de una acción constitucional para que se le dé el presupuesto que requieren para el cumpliendo con sus funciones”, ahondó en un comunicado difundido este 26 de diciembre de 2021.
Montes Zavala indicó que es importante que el poder judicial tenga un presupuesto digno para que siga creciendo. En cambio, lo que se les asignó es un presupuesto “demasiado limitado” que alcanza apenas a cubrir sus gastos operativos, pese a que actualmente con el nuevo sistema justicia penal se necesita el doble de los jueces de control.
“Se necesita casi del doble de lo que se presupuestó, vienen las salas, se necesitan juzgados familiares, más civiles. El Poder Judicial está rebasado no por incapacidad sino por la falta de presupuesto”, afirmó.
Se pronunció a favor de que haya policías en las salas de los juzgados para evitar situaciones de inseguridad vividas recientemente. Por otro lado, Montes Zavala criticó que el Ejecutivo Estatal siga entrometiéndose en los nombramientos de los magistrados, ya que muchas veces se privilegia el compadrazgo sobre la capacidad y honorabilidad de los magistrados electos.
