Elisa Juárez García, una joven estudiante de literatura de la Universidad Autónoma de Baja California Sur, y con un gran futuro en el modelaje, perdió la vida con apenas 19 años de edad, luego de luchar contra un diagnóstico de hemorragia cerebral que le fue detectado.
Sin embargo, más allá de su muerte, Elisa, el regalo más valioso que la muerte puede dar después de la vida, donó cinco de sus órganos al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de La Paz.
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“La paciente en cuestión había externado en vida el deseo de donar, y la familia ya estaba enterada de esto, la familia era entusiasta en que su hija pudiera vivir a través de su donación en otras personas. Fue una procuración satisfactoria y todos estamos muy agradecidos con la familia ya que pudimos obtener dos riñones, dos córneas y un hígado que dan esperanza y calidad de vida a cinco personas que han estado en lista de espera”, explicó Ariadna Romero, Médico Cirujano de Trasplante Renal del IMSS.
La procuración multiorgánica tuvo lugar el pasado 16 y 17 de abril, en la clínica No.1 del Instituto Mexicano del Seguro Social, donde los padres de la joven tuvieron a bien honrar la palabra y el deseo de su hija de ser donadora de órganos.
Situación que llenó de entusiasmo a los médicos, al hospital e inclusive a la propia familia, pues los pasillos de ese hospital aguardaban el momento para que al ser trasladada al quirófano, los presentes entre aplausos, lágrimas, entusiasmo y mucha gratitud, pudieran darle el último adiós.
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“Es un poco difícil porque no todos lo ven a bien, pero en general la mayoría es muy entusiasta en el hospital, sobre todo se contagian por la familia, la familia es la que se siente muy agradecida de que se pueda cumplir el deseo de dar vida. Precisamente en su despedida hacen como una valla para dar el adiós a la paciente, y es como todo un proceso que ayuda mucho en el duelo de los familiares”, explicó la médica Ariadna Romero.
Juvenal Vidrio Almeida, quien es el Coordinador de Donación y Trasplantes de Órganos y Tejidos del IMSS indicó que los riñones de Elisa fueron trasplantados de manera exitosa a dos pacientes del IMSS que por años se encontraban en listas de espera, tras padecimientos de insuficiencia renal crónica, asimismo las córneas fueron donadas a dos pacientes que sufrían ceguera visual y su única esperanza era un trasplante para recuperar la vista, y finalmente el hígado, fue trasplantado en la Ciudad de México, pues esta cirugía no se realiza en el Hospital de La Paz.
Los pacientes que pueden ser donantes, son aquellos que fallecieron por muerte encefálica (destrucción irreversible del cerebro) y se estima que en Baja California Sur, dentro de este hospital apenas el 50% de los pacientes que sufren este tipo de muertes suelen ser donadores.
En Baja California Sur, el programa de donación de órganos inició en el año de 2008 y hasta la fecha se han logrado realizar un total de 87 procuraciones, beneficiando a más de 244 pacientes en los últimos 10 años.
“Hace años la donación era algo más raro, todavía hace dos años era algo contado, generalmente se tiene un promedio de tres con procuración multiorgánica en este hospital en el año y ahorita en lo que vamos del año ya llevamos tres, entonces la verdad es que ha ido aumentando muy bien” comentó Alejandra Triano Morales, médica del área de procuración de órganos y trasplantes.
Por fortuna, las listas de espera en Baja California Sur suelen ser muy cortas a diferencia de otros estados, el órgano más solicitado es el riñón y hasta ahora la lista de espera suele estar entre las 30 y 40 personas.
