Desde el sábado 23 de abril, vecinos de la colonia Tres de Octubre, Amparo Sánchez, San Martín, Villa Urrutia y Hacienda Los Laureles, se quedaron sin agua; sin embargo, los de este último fraccionamiento llevan dos años con el problema, sin que la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (Cespt) les dé una solución.
“No hemos tenido respuesta de nada, las fugas siguen, y está avanzando más el movimiento de la tierra”, comentó una de las manifestantes de Camino Verde
“No nos han dicho nada sobre el dichoso estudio que están haciendo, pero se sabe que la culpa es de Cespt porque el agua se sigue tirando y es de su pila”, comentó Luisa una de las damnificadas
El miércoles 16 de marzo vecinos de Camino Verde se plantaron a las afueras de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (Cespt), para exigir que la paraestatal acepte la responsabilidad en los derrumbes de sus casas y que subsane los daños que se originaron a consecuencia de las fugas de agua que no atendió el organismo.
La mañana del jueves 10 de marzo, una llamada al número de emergencia 911 alertó a los vecinos de Camino Verde de nuevos deslizamientos de tierra; horas antes autoridades de los tres niveles de gobierno llevaron a cabo una reunión urgente donde se determinó la reubicación de 753 personas que viven en la zona inestable.
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de Tijuana llamó al gobierno de Baja California a invertir más recursos para mejorar la infraestructura de agua en el estado, ya que las deficiencias que presentan inhiben el desarrollo.