Una vez más el gobierno estadounidense pone en la mira a presuntos narcotraficantes que para las autoridades mexicanas no se encontraban en el radar de personas perseguibles por la justicia. Se trata de una importante red de individuos identificados como los Hermanos Bonques, a quienes señalan de participar en la producción de heroína y opioides para el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y realizar el trasiego de drogas derivadas del cultivo de la amapola hacia la Unión Americana. Esta célula criminal, que opera desde el municipio de Xalisco, Nayarit, estaría vinculada al tráfico de fentanilo en competencia con el Cártel de Sinaloa.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC, por sus siglas en inglés) sancionó el 19 de noviembre a nueve mexicanos presuntos integrantes de este clan, involucrados en el tráfico de fentanilo, heroína, otras drogas letales y lavado de dinero. Ellos son Roberto Castellanos Meza alias El Beto Bonques, identificado como el líder, y los hermanos Juan Carlos, Iván Axayácatl y Giovanni, estos últimos de apellidos Castañeda Meza. Además de José Adrián Castillo López, jefe de plaza en Nayarit para el CJNG; Luis Alonso Navarro Quezada, su esposa Erandiny Jazmín Arias Ponce; así como el matrimonio formado por Araceli Castillo Peinado y José Sinue Castro Álvarez.
De acuerdo con información de autoridades estadounidenses, los Bonques son socios cercanos a Rubén (o Nemesio) Oseguera Cervantes alias El Mencho, líder general del CJNG, y Audias Flores Silva alias El Jardinero, jefe regional de la misma organización delictiva en Nayarit. Tanto Castellanos como los Castañeda se encuentran entre las familias de traficantes de heroína más relevantes de la Sierra Madre Occidental mexicana que se abrieron camino hacia California a principios de los años noventa, y, por lo tanto, están bien posicionados para explotar un mercado norteamericano ampliado por los medicamentos recetados.
Asegura la OFAC que Beto Bonques posee campos de opio en las montañas de Nayarit y produce heroína. También destaca que Castellanos Meza está involucrado en la intermediación de ventas de cocaína y el transporte de esa droga desde Colombia a través de pequeños aviones y barcos. El 18 de noviembre, la USAO-SDCA hizo pública una acusación formal que señala a Roberto Castellanos de conspiración para distribuir cocaína. Por ello, esta dependencia del Tesoro estadounidense le designó en la lista de cabecillas del narcotráfico “por haber participado o intentado participar en actividades o transacciones que hayan contribuido materialmente o representen un riesgo significativo de contribuir materialmente a la proliferación internacional de drogas ilícitas o de sus medios de producción”.
En cuanto a Iván Axayácatl y Juan Carlos Castañeda Meza, la institución de la Unión Americana tiene el antecedente de que, en noviembre de 2007, ambos hermanos estuvieron involucrados en un altercado con autoridades mexicanas que investigaban un supuesto laboratorio clandestino de drogas en Xalisco, Nayarit. El asunto terminó en balacera y la detención de Iván, la hospitalización de Juan Carlos y la incautación de heroína. Sin embargo, para las autoridades mexicanas simplemente se trataba de unos “simples” narcotraficantes, quienes negaron su pertenencia a grupo criminal alguno y no les dieron mayor importancia, tan es así que pronto recuperaron su libertad.
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Por su parte, José Adrián Castillo López, que tiene como posible domicilio la comunidad de Pantanal, Nayarit, está identificado en las pesquisas estadounidenses como jefe de plaza de Tepic y Pantanal para el CJNG, que suministra narcóticos a redes de tráfico de drogas que operan en Colorado, Nevada y California. Castillo es abastecido de heroína por Beto Bonques. Con él, colabora Luis Alonso Navarro Quezada, también residente de Pantanal, involucrado en el tráfico de fentanilo, otras drogas, lavado de dinero y tráfico de personas. El 15 de noviembre de 2023, un Gran Jurado federal en el Tribunal de Distrito de EU Unidos para el Distrito de Colorado presentó una acusación formal contra Navarro Quezada, acusándolo de 108 cargos relacionados con la distribución de más de 3 mil 240 gramos de fentanilo entre el 3 de abril y el 14 de noviembre de 2023.
Otros cargos de Navarro Quezada incluyen la distribución de heroína, metanfetamina y cocaína, así como el lavado de dinero derivado del fentanilo y otras drogas. Según la acusación, otros involucrados en la conspiración trasladaron las ganancias de la droga desde Colorado a Navarro Quezada en México a través de transferencias bancarias, utilizando diferentes nombres y direcciones para ocultar sus identidades. Presuntamente, Navarro paga a traficantes de personas indocumentadas, para que lleven ilegalmente a sus socios de confianza a través de la frontera norteamericana y trabajan para él como traficantes de drogas y/o dinero, recogiendo y entregando narcóticos, incluido el fentanilo y las ganancias de la droga.
La esposa de Navarro Quezada, Erandiny Jazmin Arias Ponce, es señalada como una de las conspiradoras que ha ayudado con la recolección y transferencia de las ganancias de la droga. El fentanilo lo reciben de un matrimonio de Sinaloa integrado por Araceli Castillo Peinado y José Sinue Castro Álvarez, quienes ordenan a terceros -con sede en EU- que recojan grandes cantidades de pastillas de fentanilo en lugares preestablecidos y las entreguen a redes de distribución como la operada por Navarro Quezada.
Así, todos ellos ahora son sancionados en la lista de narcotraficantes con los que los estadounidenses no pueden realizar transacciones comerciales o financieras, aunado a que quedaron expuestos para que autoridades mexicanas realicen las investigaciones del caso y procedan en consecuencia.
