Son dos épocas de los políticos que se contraponen: la buena durante el tiempo de campaña; la mala cuando ya son gobernantes, legisladores o en algún puesto de representación popular. En la primera nos abruman con promesas y para que no quede duda, solo basta recurrir a los medios de comunicación, especialmente tv y radio. En todos aparecen sus promesas y los votantes somos tan necios que creemos a pesar de todos los desengaños del pasado.
Anda por ahí un candidato que legalmente no debería ser; primera porque no cumplió el requisito de ganar una encuesta, ¡ni siquiera participó! ¿Cómo iba a ganarla? Además está demandado por no cumplir con el pago de pensión para sus hijos menores. Entre muchas cosas que ha ofrecido, recién leemos que se comprometió a reducir los tiempos de traslado de los automovilistas “mediante acciones específicas”.
Como si las alcaldías tuvieran suficiente capital para realizar vialidades, puentes, obras que facilitaran los traslados; por lo pronto el gobierno estatal está construyendo algunas obras que en la Zona Este ayudarán bastante, en especial desde la tercera sección del Río Tijuana. Ojalá que les alcance el presupuesto para que lleguen al bulevar 2000 y le pongan algunas señales para que los automovilistas transiten con más seguridad. Siguen -y es una desgracia- los continuos accidentes que cobran vidas o dejan heridos permanentes.
Volviendo al comentario inicial y cuando ya estamos en la recta final de las campañas, vale la pena reflexionar sobre los candidatos que en montón andan ofreciendo, lo que como ciudadanos simples o dirigentes no han aportado a sus comunidades. De pronto exitosos en ganar dinero, gracias a sus empresas o profesiones, se han decidido entrar a la política para ayudar a la ciudadanía a vivir mejor, si nos basamos en sus ofrecimientos. ¿Fueron hombres o mujeres comprometidos con sus comunidades? La mayoría no. ¿Por qué creerles?
Analice fríamente a las personas que andan pidiendo el voto y lo que están pidiendo a cambio: ¿Son factibles sus ofrecimientos, promesas? ¿Están en su área de influencia si ganaran? Resulta que hasta los aspirantes a regidores, prometen acciones que, de ganar, no estarían en su influencia para decidir.
No deje que le den atole con el dedo, aunque sea lo de moda. Entre las docenas de candidaturas, investigue y escoja la mejor opción.
Que no decidan las encuestas.
Nota 1. El Presidente AMLO cierra su sexenio fortalecido de su misoginia; a la buscadora Ceci Flores y la Dra. María Amparo Casar ya las condenó.
Nota 2. Entre los promotores de la marihuana, deberían escuchar voces autorizadas de los médicos.
Nota 3. Ojalá que el Viaducto de Tijuana sirva para algo.
Luz Elena Picos es directora de Red Social de Tijuana.
Correo electrónico: redsocialtijuana@hotmail.com www.lagacetaredsocial.org
