Usar el bordo de la canalización río Tijuana, o en su caso, las losas de dicho cauce con cemento hidráulico, sería un desahogo fenomenal; un alivio al tránsito que genera tanta pérdida de tiempo, economía, mal genio, y se evitarían embotellamientos en las horas “pico”. Hacia USA, a veces se llega hasta el “Cristo Rey” de los Álamos y genera un caos de movilidad, atolondrado y mal organizado; además, nunca hay motociclistas de la policía municipal, guiando, dirigiendo, desviando o realizando alguna aportación para hacer circular tal masa vehicular.
Sería buena puntada usar el bordo del canal, desde la clínica 1 hasta la línea, y allí desviarlo a la garita de San Ysidro. México y USA acordaron sanear el canal, el picadero más grande del mundo: limpiar de pestes, basura, vagos, suciedad, ordenar, etc. Ahora es la oportunidad para poner materia gris a tal asunto de tránsito y hacer una vía libre, directo a Estados Unidos desde la colonia Campos (frente al Cerro Colorado).
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Claro, hay que invertir. Mucho pavimento, señalamientos, sanear concreto. Ese lugar de canalización lo usé como escuela de manejo para mis familiares allá por los años 80; por ello sé que sería la salvación al tránsito vehicular que se hace por las mañanas, todos los días, por quienes trabajan en el otro lado y toman la Vía Rápida Poniente (lado de la colonia Buena Vista).
Urge un método o solución vial, pues no vemos claro el Respira con la gobernadora Marina. Los regidores deben pensar en esta solución vial potencial, así como dar movilidad a Tijuana, porque conducir en esta ciudad es catastrófico. Todos los días aumenta el parque vehicular; hay nuevos conductores que engrosan las calles. Además, debería implementarse el “Hoy no circula” tipo D.F.; usar solo los carros necesarios y que ameriten traslado, no en tramos cortos ni para ir a las tortillas. Menos carros, más salud.
En verdad luciría fantástica la fila hacia Estados Unidos por el bordo; caben dos autos hacia la misma dirección. Hoy, ir a Playas de Tijuana por la vía rápida es una locura; por ello, toda esa nueva vialidad sería como la inauguración del canal allá por 1971. Definitivamente la movilidad se beneficiaría; Zona Río no es un área pudiente, por lo que el enorme tránsito a los United States genera pérdidas al saturarse los accesos.
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Hay ideas constructivas para mejorar el vivir de los tijuanenses.
Atentamente,
Leopoldo Durán Ramírez.
Tijuana, B.C.
