De Trez en Trez
Uno.- En su momento, en este mismo espacio comentamos que el Gobierno Federal le apostaba al tiempo y al olvido en la desaparición en 2014 de los 43 estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero, conocido como el Caso Ayotzinapa.
Y en efecto, “Enriquepeñanieto” le fue dando largas; la entonces PGR anunció su “verdad histórica”; luego vino el “ya me cansé” de Jesús Murillo Karam, su retiro; más largas, ayuda internacional. Pocos avances. La apuesta iba caminando y la impunidad creciendo. Andrés Manuel López Obrador en su tercera campaña por la presidencia hizo suya la bandera de este caso y en 2018 ganó la presidencia.
En su discurso de protesta del cargo, afirmó ante el Congreso de la Unión aquel 1 de diciembre: “Hoy se constituye una comisión de la verdad para castigar los abusos de autoridad, para atender el caso de los jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa”. Luego, en el Zócalo, hizo 100 compromisos; el 89 lo dijo así: “Se investigará a fondo la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa; se conocerá la verdad y se castigará a los responsables”.
El lunes 26 de septiembre se cumplirán 8 años de la desaparición de los estudiantes y casi 4 años de las promesas del Presidente López Obrador, y Ayotzinapa sigue siendo noticia… no por los resultados, sino por lo enredado del asunto, lo que hace dudar de las acciones y sus resultados. Igual que antes.
Doz.- El 18 de agosto de 2022, la presidencia de la Comisión para la Verdad, publicó un informe confirmando que la desaparición forzada de 43 estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero, fue un crimen de Estado. Dijeron “su verdad”.
El 19 de agosto se detuvo al ex-procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, quien expresó la “verdad histórica” del caso. Está siendo procesado por desaparición forzada, tortura y delitos contra la administración de justicia.
La Fiscalía General de la República (FGR) anunció la obtención de 83 órdenes de aprehensión adicionales en relación con el caso. No se ha informado de todas ellas.
Un juez de Tamaulipas dejó en libertad a 77 presuntos implicados en la desaparición de los estudiantes; a mediados de este mes, el mismo juez absolvió a José Luis Abarca del secuestro de los 43 normalistas, pero éste seguirá en prisión para enfrentar, al menos, otros tres procesos penales. Abarca era presidente municipal de Iguala y la noche de los hechos estaba “enfiestado”.
En este caso también se ha mencionado y cuestionado el papel del hoy secretario de Marina, Almirante José Rafael Ojeda, que fue Comandante de la Octava Región Naval en Guerrero cuando sucedieron los hechos; se ubicó en Iguala a Omar García Harfuch, hoy secretario de Seguridad en CDMX, que en ese entonces ocupaba un puesto de comisario en la división de Gendarmería de la Policía Federal, había dirigido antes la Federal en Guerrero. Ambos recibieron la “absolución”: presidencial, el primero, y de su jefa, el segundo.
Tomás Zerón (exjefe de la Agencia de Investigación Criminal, AIC), acusado de secuestro y tortura en el caso, está en Israel, país al que México ya hizo la petición para que sea extraditado a nuestro país, sin éxito hasta hoy.
Hay también 6 militares detenidos (se entregaron); entre ellos el hoy General retirado -entonces Coronel- José Rodríguez, que era el comandante del 27 Batallón de Infantería, con sede en Iguala, Guerrero, durante el ataque contra estudiantes. Otros 5 militares se suman, acusados de dar muerte a 6 de los 43 estudiantes. Su defensa dice que son inocentes y el caso endeble.
Trez.- Y como los ejemplos citados, el embrollo continúa; lo mismo las preguntas iniciales: ¿Dónde quedaron los 43 estudiantes? ¿Qué les pasó? ¿Quiénes son los responsables?
Así las cosas (y otras más). Resultará muy difícil para AMLO cumplir con su compromiso 89 expresado en 2018; el tiempo se le acaba, a no ser que…
P.D.– Hay más de 100 mil víctimas de desapariciones en México.
Óscar Hernández Espinoza es egresado de la Facultad de Derecho por la UABC y es profesor de Cultura de la Legalidad y de Formación Cívica y Ética en Tijuana.
Correo: profeohe@hotmail.com