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domingo, octubre 13, 2024
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La anticoncepción de emergencia: la píldora del día después

Conzultoría Matrimonial y Familiar

 

 

 

Recuerdo que cuando salieron estas pastillas para prevenir embarazos después de haber tenido relaciones sexuales, los mas puristas pegaron el grito en el cielo por considerar que iba a haber mayor promiscuidad, al promover que hubiera más relaciones sexuales sin cuidados; al fin que ya habían salido este método para prevenir embarazos. Fueron declaraciones alarmistas, sobre todo donde muchos (instituciones privadas y gubernamentales e iglesias) predecían que iba haber mayores abortos (todavía no autorizaban los abortos legales); total, que fue un escándalo mediático que al cabo del tiempo, como todo, quedo en el olvido.

Hoy en día la anticoncepción de emergencia es un método de control de la natalidad o anticonceptivo, no abortivo, que una mujer puede usar en los primeros tres a cinco días de haber tenido relaciones sexuales sin protección, por si tiene preocupación de que su método anticonceptivo haya fallado, que haya usado incorrectamente su anticonceptivo regular; cuando por calentura se olvidaron de usar condón, o haya habido una agresión sexual (violación). Estas pastillas son una forma segura de prevenir un embarazo. Se les llamó “la píldora del día después” mediáticamente por los puristas, que la consideraron como abortivas.

Conocer los diferentes tipos, cómo actúan y su efectividad es muy importante para evitar desde conflictos familiares hasta tener un buen método anticonceptivo para tranquilidad y seguridad de las mujeres.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la anticoncepción de emergencia puede prevenir hasta el 95% de los embarazos cuando se toma en los primeros 3 a 5 días después de haber tenido relaciones sexuales o de haber sido violada. Es importante enfatizar que la anticoncepción de emergencia (incluyendo el DIU) es un método anticonceptivo, no es un aborto. No termina un embarazo, pero lo previene, y no protege contra infecciones de transmisión sexual.

Actualmente, existen dos métodos: las píldoras de anticoncepción de emergencia (PAE) y los dispositivos intrauterinos (DIU) de cobre. Un dispositivo intrauterino de cobre es la forma de anticoncepción de emergencia más efectiva disponible.

La anticoncepción de emergencia se refiere a los métodos anticonceptivos antes descritos que pueden utilizarse para prevenir un embarazo después de tener relaciones sexuales. Cuanto antes se utilice, mayor es su eficacia: ésta disminuye al 75% transcurridas más de 72 horas. Su uso es ocasional y no debe ser utilizado como forma regular de control de natalidad.

En nuestro país existen dos tipos: Píldoras anticonceptivas de emergencia: a) que consisten en la combinación de dos tipos de hormonas (etinilestradiol y levonorgestrel), y b) Levonorgestrel solo; si vomitan 2 horas después de haber tomado el Levonorgestrel o 3 horas después de tomar la píldora con ULA, podrían necesitar repetir la dosis (consulten mejor a su médico). Y la inserción postcoito de un dispositivo intrauterino de cobre DIU-Cu: es el método más eficaz, ya que reduce el riesgo de embarazo en más del 99% si se coloca antes de que transcurran 120 horas después del coito.

Las pastillas funcionan impidiendo el embarazo, al evitar o retrasar la ovulación; no pueden provocar un aborto. El DIU de cobre impide la fertilización al provocar un cambio químico en el espermatozoide y el óvulo antes de que lleguen a unirse. La anticoncepción de emergencia no puede interrumpir un embarazo ya establecido ni dañar al embrión en desarrollo.

Se deberá utilizar cuando se han tenido relaciones sexuales y no se ha usado ningún método anticonceptivo; en caso de agresión sexual cuando la mujer no estaba protegida por un anticonceptivo eficaz; falla el método por uso inadecuado o incorrecto; si se olvidó tomar los anticonceptivos orales por más de tres días seguidos; en caso de retrasarse la aplicación de un anticonceptivo inyectable; por rotura del condón durante el coito, por expulsión del DIU, etc.

Los efectos secundarios derivados de su uso son similares a los de las píldoras anticonceptivas orales: náuseas y vómitos, ligero sangrado vaginal irregular y fatiga. Estos efectos son pocos frecuentes, leves y normalmente se resolverán sin necesidad de ninguna otra medicación. Toda la información anterior fue tomada de la OMS y varias páginas médicas de internet; si tienen dudas, consulten mejor a su médico.

 

El Lic. Roberto Bautista es terapeuta de parejas con maestría en Mediación.

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