Por tiempo indefinido está suspendida la obra del gasoducto que se instalaría bajo el Bulevar Héctor Terán Terán en la colonia Jardín Dorado en Tijuana. La empresa C&J Tech incumplió con diez requerimientos para el desarrollo de los trabajos, y mientras tratan de solventarlos, vecinos presionan para evitar afectaciones por las excavaciones que en temporada de lluvia derivarán en socavones.
El 13 de octubre, el Ayuntamiento de Tijuana suspendió el proyecto al detectar que, entre otros incumplimientos, a la empresa le faltaron 20 centímetros de excavación para la instalación del ducto que debe estar a un mínimo de 1.70 metros de profundidad.
“Nos urge que el Ayuntamiento dé una solución, pero que la solución no sea que pasen por ahí, que los manden a otra ruta. Y urge que nos arreglen el pavimento por el tiempo de lluvias. Incluso los ingenieros de ellos, uno me dijo que sí urge arreglarlo y que le han estado metiendo presión a la empresa y que no les resuelve, porque si dejan más tiempo abierto, se va a empezar a llenar de agua con el tiempo de lluvias y a desmoronar”, explicó Saúl Zamudio, presidente de colonos de Jardín Dorado.
C&J Tech dejó de acudir a las audiencias para aclarar ante el Ayuntamiento de Tijuana las diez inconsistencias encontradas. Al transcurrir el plazo para el desahogo de pruebas, ahora tendrán que entregar la documentación como si se tratara de un proyecto nuevo, pese a haber iniciado los trámites en 2020.
“Tendríamos que revisar porque ya modifica completamente el trazo de la obra y ahorita ya sería… no es empezar de cero, pero sí empezar un procedimiento con nosotros”, comentó Miguel Bujanda, secretario de Desarrollo Territorial, Urbano y Ambiental (DTUA) de Tijuana.
“En esa modificación, ellos están obligados a presentar documentales nuevos para poder justificar la nueva ruta. Y en ese paso estamos ahorita. Nosotros estamos ahora, solicitándoles ese documental para solventar las deficiencias y poder continuar con la obra”, comentó Ricardo Riesgo, jefe de organización de la DTUA.
La obra que le suministraría de gas a tres naves industriales de El Águila mediante líneas de 5 kilómetros podría pasar bajo el Bulevar Terán, aunque supuestamente parte de los requisitos, es contar con la aprobación de los vecinos, según manifestaron las nuevas autoridades municipales.
“Si cumple con todos los requisitos, sí, pero la ciudadanía es importante, es escucharlos; independientemente que es una vialidad de intercomunicación importante en la ciudad y que las características de esa vialidad son factibles para que pueda haber una línea, y además aclarar que es gas natural y no gas propano, ya que son comportamientos muy diferentes porque es una línea de cuatro pulgadas, la ciudadanía es vital en todo tipo de proyecto, es importante”, reiteró Alfonso Padrés Pesqueira, director de Administración Urbana de Tijuana.
“Prácticamente, el tema no es nada más el tema de los centímetros. Es un tema técnico que completamente el trazo que nos mostraron ese día en la diligencia, no es el correspondiente, por eso está suspendida la obra”, comentó el secretario Bujanda.
“Es un análisis de impacto urbano de la nueva ruta. Sí lo tienen, pero de la anterior. Memoria descriptiva del proyecto, también de la nueva ruta, no de la anterior. Dictamen de congruencia, dictamen de uso de suelo, resolución de diligencia de seguridad de energía, de ambiente y de la CEA (Comisión Estatal del Agua). Permiso para la Comisión Estatal de Servicios Públicos, de la Comisión Federal (de Electricidad) y de todos los servicios que se encuentran presentes en la vialidad. También tienen que tener todos los manuales de procedimientos para todas las emergencias y una unidad verificadora ya registrada para que estos trabajos cumplan con la normatividad vigente”, enumeró Ricardo Riesgo, supervisor de la dependencia municipal.
