No se requiere sabiduría para la respuesta a ese y muchos delitos que sufre la sociedad: incapacidad de identificar a los destructores de vidas y castigarlos. Eso además daría paz a las familias y posibilidad de encontrar “aunque sea un huesito”, como declaró un sufrido padre de familiar “para enterrarlo y saber dónde quedó”.
México tiene algunas barajas que jugar. Una, el envío de más narcotraficantes; dos, la reducción de poder de los narcotraficantes y los narcos políticos; tres, la eliminación total de la producción y envío de fentanilo y algunas cosas más que solicite Trump.
Las acciones afirmativas son intervenciones específicas, excepcionales y por lo general temporales. Estas tienen como objetivo permitir un trato diferenciado o preferente que beneficie a un grupo determinado que ha resultado víctima de un trato excluyente sistemático, estructural e histórico.
El hecho de que sus redes sociales estén llenas de sus actividades, dando santo y seña de lo que hace su familia, cuáles son sus posesiones, viajes y hasta información sensible, es justamente lo que facilita a los criminales el camino para tender la emboscada.
La lectura semanal de ZETA me hizo conocer la valiente labor informativa de Don Jesús y Héctor. Este último, desde mi llegada, pidió que fuera a hablar con el capitán del barco, el señor Blancornelas.
Mario Vargas Llosa es considerado como uno de los grandes protagonistas del “boom latinoamericano”, junto con el colombiano Gabriel García Márquez, el argentino Julio Cortázar y el mexicano Carlos Fuentes, todo un fenómeno literario que en los años de 1960 y 1970 dio a conocer en todo el mundo a estos grandes artífices de la literatura, que entonces eran jóvenes.
Es el caso de Juan Manuel Gastélum Buenrostro, (1954 - 2025), Internet refiere: “Fue un político mexicano afiliado al Partido Acción Nacional (PAN). Fue alcalde de Tijuana dos ocasiones, una de manera interina y otra, de forma electa”.
El peso mexicano ha variado de 1 por un dólar, 2 por un dólar, 4.65, 8.50 12.50 y luego la debacle, la caída meteórica del peso hasta llegar a miles por un dólar, lo que obligó al gobierno a quitarle tres ceros y volver a empezar la cuenta con 10 pesos por un dólar, hasta la circunstancia actual de 20 y quién sabe cuánto más por un dólar.
Es claro que no son los trabajadores de todos los días, van variando por el rol que les toca. Y la experiencia es que nunca hemos visto a uno de mal humor, negligente o aflojerado. Y de todas las edades (hay mucho joven).