La nueva generación de “políticos” de Morena ha demostrado que la democracia, la honorabilidad y la fidelidad a los principios, es algo prescindible cuando se trata de acaparar el control y el poder.
Existe un gran número de perspectivas para analizar los resultados del proceso de Revocación de Mandato, celebrado el domingo 10 de abril y promovido por el Presidente Andrés Manuel López Obrador en contra de sí mismo, como parte de los compromisos de campaña y una maniobra partidista para preservar el control de la agenda pública, por encima de los temas prioritarios del país.
El proceso de Revocación de Mandato se ha vuelto el encargo prioritario del Gobierno de México a los mandatarios morenistas, entre ellos Marina del Pilar Ávila Olmeda, la cual -desde hace algunas semanas- se ha visto obligada a enviar toda la caballería y estructura gubernamental para impulsar la participación ciudadana.
Además, pagó 37 millones de pesos que se adeudaron desde la administración del ex gobernador Jaime Bonilla Valdez, quien incumplió con el convenio realizado desde la administración de Francisco Vega de Lamadrid. De 2019 a 2022, el Teletón recibirá más de 87 millones de pesos.