Imaginemos el momento en que Winston Churchill es electo primer ministro de Inglaterra cuando los ingleses estaban siendo atacados por la bestial fuerza del nacismo, que bombardeaba inclemente la ciudad de Londres pensando que podría doblegar al León Británico. Pero no ocurrió. La fuerza y el espíritu de los ingleses finalmente ayudo a derrotar a Hitler.
300 mil jóvenes soldados reservistas de Israel se aprestan a atacar el norte de Gaza y piden a la población civil de casi un millón y medio de habitantes que se retiren a zonas en el sur que no serán atacadas.