Veinte kilómetros es lo que se debería sustituir de tubería en Tijuana para que el Acueducto Florido-Aguaje funcione completamente; pero, por cuestiones presupuestales, sólo se puede atender el 1.2 por ciento de la infraestructura en una obra programada para la segunda semana de enero de 2026, cuando sean conectados 250 metros de tubería nueva, luego de la megafuga de agua que propició la explosión de un tramo el martes 9 de septiembre de 2025 en la zona de La Presa.
La obra de sustitución de 250 metros de tubería registra 85 por ciento de avance, pero, ante los inconvenientes que pudieran presentarse durante las festividades decembrinas, la obra será suspendida hasta la segunda semana de enero de 2026, cuando la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) anuncie la fecha de un corte de agua por 50 horas para 635 colonias de Tijuana.
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La obra emergente del nuevo tramo del Acueducto Florido-Aguaje se realiza sobre el bulevar Díaz Ordaz, con tubería de 54 pulgadas de diámetro, que será suspendida el 15 de diciembre de 2025, y queda pendiente la interconexión con el acueducto para enero de 2026, cerca del lugar donde se registró la fuga del 9 de septiembre, en el tramo kilómetro 9+450, donde colapsó la tubería al cumplir su vida útil, después de 40 años de operación.
Ninguna administración estatal en Baja California ha considerado un proyecto integral de sustitución de tubería o infraestructura enterrada. Un ejemplo es que, previo a la explosión de la megafuga, el tramo del kilómetro 9+450 del Acueducto Florido-Aguaje, había sido reparado ocho veces en los últimos cuatro años, lo que representaba un riesgo, ya que es la tubería que soporta 18 atmósferas de presión y trabajaba desde que fue construida en 1982, y que debió haber sido sustituida en 2013.
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De manera óptima, si se quisiera resolver completamente el problema de fugas en el Acueducto Florido-Aguaje, se tendrían que invertir hasta dos mil millones de pesos para sustituir 20 kilómetros de tubería, explicó el subdirector de CESPT, José Díaz Verdugo.
Para restablecer el servicio de agua tras la emergencia de septiembre, la entidad únicamente sustituyó cinco metros del tramo más dañado del acueducto, en Lomas de la Presa.
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Aprovechando que 635 colonias tendrán suspendido el servicio de agua, la CESPT programó dos proyectos adicionales para utilizar el corte de agua. El primero consiste en la rehabilitación de la tubería de 24 pulgadas que alimenta al Tanque Aguaje de la Tuna; el segundo contempla la reparación de una fuga en el desfogue, a la altura de la colonia Planetario.
