Con un historial delictivo que data del 2006 en Baja California y tres aprehensiones previas, Jorge Luis Mendoza Uriarte el Güero Chompas, cabecilla de una célula del cártel sinaloense, no contaba con ninguna orden de aprehensión pendiente o expediente abierto en su contra en el estado norteño al momento de ser capturado en el poblado de Las Milpas Dos en Sinaloa, a las 10:13 horas del jueves 7 de noviembre del 2024.
ZETA consultó a las fiscalías, la de Baja California y la delegación de la FGR en el estado, y en ambas salió “limpio”, sin mandamientos judiciales en su contra.
Esto a pesar que desde febrero de 2013 Abel Galván, el entonces Subprocurador Contra la Delincuencia Organizada de la fiscalía bajacaliforniana, declaró en repetidas ocasiones que Luis Mendoza -liberado el 3 diciembre del 2012 por un amparo federal- estaba involucrado en por lo menos 40 de los 80 asesinatos que se habían cometido hasta ese momento en Tecate y Tijuana; también dijo que el cabecilla había ordenado muertes incluso durante el año que estuvo en prisión, y aseguró que la fiscalía estaba integrando las carpetas porque había señalamientos directos.
Con operatividad en Tecate y Zona Este de Tijuana, que amplió al corredor Tijuana-Rosarito, el grupo criminal que encabeza el Güero Chompas, ha sido relacionado con decenas de homicidios incluidos los de policías, así como líderes criminales del Cártel Jalisco y del Arellano.
La recaptura del Güero Chompas se informó extraoficialmente hasta el viernes 8 de noviembre; manifestaron que la realizaron elementos de la Guardia Nacional. Mendoza, dos mujeres y siete hombres más, fueron interceptados en la carretera estatal a la altura del poblado La Reforma, cerca de Milpa Dos.
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El Registro Nacional de Detenciones, describió a Mendoza como un masculino con barba y bigote escasos, cabello corto, que, al ser detenido, usaba una playera azul tipo polo de la marca Hugo Boss y tenis grises.
El resto de los detenidos fueron identificados como: Luz del Carmen “N” de Tijuana, Baja California; Juan Carlos “N” de quien desconocen su origen. Los otros siete eran oriundos de Sinaloa: Eibar Jair “N”, Joel Guadalupe, Gerardo Guadalupe “N” y Víctor Geovani “N” de Culiacán; Lorenzo “N” y Wilmar Omar “N” de Costa Rica; y la joven Jema Yareli “N” de Mazatlán.
La autoridad no dio detalles de la aprehensión, pero el día que los detuvieron se registraron cinco enfrentamientos armados en la entidad, entre presuntos criminales y elementos del Ejército, incluidos una balacera en el área de Costa Rica y otra en las Milpas Dos, en los que se presume participaron Mendoza y su gente.
Investigadores enmarcan la presencia y participación de Mendoza Uriarte en Sinaloa, como parte de la pugna interna que prevalece en el Cártel de Sinaloa entre los “Chapitos”, hijos de Joaquín Guzmán Loera, y la “Mayiza”, hijos de Ismael Zambada García, originada precisamente después de la entrega de este último por parte de Joaquín Guzmán López a autoridades de los Estados Unidos en julio de 2024.
LOS URIARTE
Entre 2006 y 2010, tras la captura de Javier Arellano “El Tigrillo” -agosto 2006-, el Cártel Arellano Félix (CAF), que dominaba el tráfico de drogas en Baja California, se dividió en dos células y libró una pugna interna, Fernando Sánchez Arellano -detenido en 2014- sobrino de los capos, se enfrentó a Eduardo García Simental “El Teo” -aprehendido en enero 2010-, cuyo principal operador era Raydel López Uriarte “El Muletas” -apresado en febrero del 2010-, quien dio origen a la célula de Los Uriarte.
Al ser detenido el Muletas, sus primos, quienes ya delinquían con él, tomaron su lugar en el organigrama criminal: Francisco Javier Mendoza Uriarte “El Chapito” -detenido 2016- y el Güero Chompas.
Entre 2006 y 2010, apoyados y provistos de droga por José Antonio Soto Gastélum “El Tigre”, del Cártel de Sinaloa, los Uriarte hicieron sus contactos con proveedores de droga en Colombia y otros países de Sudamérica, lo que les permitió conservar cierta libertad operativa criminal cuando los hermanos Alfonso y René Arzate reclutaron a la mayoría de los operadores del CAF tras la captura de Fernando Sánchez en 2014, y los convirtieron en servidores de los Mayos; porque para entonces, los Uriarte llevaban varios años traficando con el Cártel de Sinaloa.
LAS OTRAS CAPTURAS
Antes, la mañana del viernes 19 de diciembre de 2014, José Luis Mendoza Uriarte fue detenido por fuerzas federales en Culiacán, Sinaloa, durante un cateo en posesión de un rifle AR-15, una subametralladora y granadas de fragmentación.
“Esta detención fue resultado de un trabajo de coordinación y seguimiento realizado al criminal por autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública de Baja California, el Ejército Mexicano y la Policía Federal, los cuales tenían ubicada desde la segunda semana de septiembre del mismo 2014”.
Le hicieron efectivas tres órdenes de aprehensión pendientes: una por homicidios y otra por robo de auto en Baja California; y una tercera por delincuencia organizada, tramitada por el Ministerio Público del Fuero Federal. Pero salió en libertad.
Antes, en diciembre del 2011, había sido capturado por la Policía Estatal Preventiva en Tijuana, cuando circulaba a exceso de velocidad por el bulevar Sánchez Taboada y avenida Antonio Caso en la Zona del Río; dio nombre falso, y tenía pendientes por ejecutar una orden de homicidio y otra por robo. Quedó libre por un amparo federal.
Luis Mendoza también fue aprehendido y liberado en Tijuana por posesión de armas en 2009.
