En plática que brindé a un selecto grupo de bajacalifornianos -a quienes reitero el agradecimiento por la invitación y atenciones que me tuvieron- respondí a la pregunta de cuando empecé a entrenar para correr el Ultra Maratón de 54 kilómetros (UBT) en el que participé días antes, a lo cual contesté que la preparación inició hace más de diez años, cuando decidí tener mejor calidad de vida, especialmente a través del deporte y el cuidado de la salud.
De manera específica, para UBT, no pude entrenar idóneamente, e incluso, cuando me inscribí, fue en distancia 30 kilómetros (para la cual tampoco pude entrenar apropiadamente); sin embargo, un par de semanas antes de la competición, recibí la feliz -pero preocupante- noticia de que iba a tener oportunidad de participar en modalidad 50 kilómetros (que terminó siendo de 54.21).
Mi agenda sólo me había dejado entrenar unas pocas semanas y a medio tren, pensando en los 30K, cuando tuve la noticia del ascenso. Ya no había nada más que hacer. No puedes entrenar en dos semanas lo que debes hacer meses antes, hasta es prohibitivo entrenar la semana previa al ultramaratón.
Lo recomendable es prepararse durante tres meses (https://vert.run/50-km-guia-completa-de-entrenamiento).
Lo que hizo razonable inscribirme en 30K y luego no desaprovechar la oportunidad y tener la audacia de participar en los 50K, fueron los años de acondicionamiento previos. Los detalles e imágenes de mi participación, se encuentran en redes sociales (https://www.facebook.com/share/p/mSpr9WaU57b3DkJ8/?mibextid=QwDbR1 y en https://www.facebook.com/share/p/XAYME3yFV83ECyyk/?mibextid=QwDbR1).
Le comenté a quienes amablemente me escucharon, que lo sucedido en el UBT tiene analogía con la vida, puesto que si te desarrollas con anticipación, cuando surja una oportunidad, podrás aprovecharla si estás preparado.
Como si no fuera suficiente reto por sí sólo, por primera vez en la vida correr una competencia tan exigente, se presentaron vicisitudes que tuve que superar. Si de por sí andas con la preocupación de que no se te olvide algo, para colmo se descompuso mi chaleco de hidratación, lo que resolví de último minuto, improvisando.
Durante la competencia transitas por múltiples etapas emocionales y técnicas, en convivencia y solitario, con momentos intensos en cada estación de apoyo, hasta que logras llegar a la lejana meta, donde lo racional se rinde, sustituyéndose por risas, lágrimas y desestrés, lavando la cortisona y disfrutando la dopamina.
Lo básico antes de la competencia y en ella, es controlar tu mente, administrar los pensamientos, tanto de preocupación como de ánimo.
Si bien siempre he dicho que la posición en que llegues es lo de menos, como sea, se siente bien enterarte que fuiste… ¡¡¡Segundo lugar en tu categoría!!! El único de México entre los primeros tres. En la clasificación General, lugar 121 entre 298 corredores (la mayoría de ellos de mucha menor edad).
La vida está llena de retos. El primero de ellos es prepararse.
Todo es cuestión de no desaprovechar la oportunidad.
Alberto Sandoval ha sido profesor, servidor público, consultor, conferencista, deportista y activista ciudadano.
Correo: AlbertoSandoval.AlianzaCivil@gmail.com Internet: http://about.me/sandovalalberto/
Facebook: Alberto Sandoval. Twitter: @AlSandoval