En enero de 2024, la economía mexicana se contrajo 0.6% respecto a diciembre pasado, la caída más pronunciada desde agosto de 2021. Además, con la disminución de la actividad económica de enero se ligan cuatro meses con retroceso, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Con cifras ajustadas por estacionalidad, en enero las actividades primarias (agricultura, pesca y ganadería) cayeron 12.9% y las terciarias (comercio y servicios) disminuyeron 0.5%. En contraste, las actividades secundarias (construcción e industria) aumentaron 0.4% a tasa mensual, según el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE).
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En referencia a ello, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero BASE, consideró que “no se ve posible un crecimiento del 2%” para nuestro país en este 2024”, anticipando además que el Producto Interno Bruto (PIB) podría contraerse en el primer trimestre del año.
En tanto, especialistas de Monex consideraron que, si bien hubo menor actividad económica en el arranque de este año, el IGAE mostró “máximos históricos” durante 2023, por lo que consideraron “similar” la inercia del fin de año con la del inicio de 2024.
“Será clave evaluar que las próximas cifras de actividad económica no reflejen un mayor enfriamiento, principalmente las de las actividades terciarias” y observar el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE), así como el crecimiento del PIB del primer trimestre.
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Actualmente, Monex estima un crecimiento anual de 2.4% para México en 2024. En días pasados, BBVA Research recortó su pronóstico de 2.9 a 2.5%, y Fitch Ratings ajustó su expectativa de 2.4 a 2.2%.
Según el IGAE, a tasa anual y con series desestacionalizadas, en enero de 2024, la economía mexicana creció 1.1% en términos reales, impulsada por el incremento de 1.9% de las actividades secundarias y de 1.1% de las terciarias. En tanto, las actividades primarias retrocedieron 7.3%
Por otro lado, el INEGI informó que, durante la primera quincena de marzo de 2024, la inflación en México registró un incremento quincenal de 0.27%, con lo que a tasa anual se ubicó en 4.48%, impulsada por el incremento en alimentos, transporte aéreo y servicios turísticos.
El aumento de la inflación quincenal y a tasa anual sorprendió al mercado, al ser superior a las estimadas (de 0.25% de incremento quincenal y 4.44% a tasa anual) Así, la inflación general volvió a acelerarse, rompiendo la racha de dos quincenas previas con desaceleración.
Los alimentos que más se encarecieron los primeros días de marzo fueron el pollo (7.04%), lechuga y col (14.76%), jitomate (3.0%) y limón (5.01%) En tanto, el precio del transporte aéreo tuvo un incremento de 35.98%, y los servicios turísticos en paquete, 10.05%.
Además, la vivienda propia aumentó 0.21% y la electricidad 0.38% En el periodo referido también registraron un alza el precio de los restaurantes y similares (0.40%) y de loncherías, fondas, torterías y taquerías (0.41%).
El índice de precios subyacente aumentó 0.33% quincenalmente, con lo que se ubicó en 4.69% a tasa anual En su interior, los precios de las mercancías tuvieron un incremento quincenal de 0.10%, y los de servicios, 0.61%.
El índice de precios no subyacente registró un crecimiento quincenal de 0.09 y de 3.84% a tasa anual. En su interior, los precios de los productos agropecuarios subieron 0.34 % y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno bajaron 0.12%, señaló el INEGI.
El jueves 21 de marzo, por primera vez en diez meses, la mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió reducir en 25 puntos el objetivo de la tasa de interés de referencia, con lo que esta se ubicó en 11%.
“Con esta decisión, la postura monetaria se mantiene restrictiva y continuará siendo conducente a la convergencia de la inflación a la meta de 3%”, indicó el banco central, cuyo pronóstico para converger a la meta del (3% +/- un punto porcentual) sigue siendo el segundo trimestre de 2025.
No obstante, Banxico contempla riesgos al alza de la inflación como depreciación cambiaria, mayores presiones de costos, que la economía muestre una mayor resiliencia a la esperada, afectaciones climáticas y escalamiento de conflictos geopolíticos.
La gobernadora del Banxico, Victoria Rodríguez Ceja, declaró que cuando las condiciones macroeconómicas y el panorama inflacionario lo permitan, se reducirá la tasa de interés, lo cual será gradual: “Tenemos un entorno aún incierto, con retos y debemos ir paso a paso, ser cautelosos, no apresurarnos analizando la inflación y la información disponible en cada decisión y actuando en consecuencia”. Según el anuncio de política monetaria, la subgobernadora Irene Espinoza fue la única integrante de la Junta de Gobierno que votó en contra de disminuir 25 puntos base la tasa de interés.
