“Monstruos están bien llamados así y se derivan de ‘monstrare’ (mostrar), porque muestran algo con un significado; ostento viene de ‘ostentare’ (presentar); portento de ‘portendere’ (pronosticar), y prodigio de ‘porro dicere’. O sea, anunciar el futuro”.
-San Agustín, La Ciudad de Dios, XXI, 8.
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Si la religión no tiene que ver con la política, entonces ¿a qué fueron a saludar al Papa Francisco las candidatas presidenciales?
Expresa Mahatma Gandhi en su libro Mi Dios, que quien dice que la religión no tiene que ver nada con la política, no sabe ni si quiera qué es la política. El santo líder hindú conocía bien los evangelios y el Nuevo Testamento. Sin renunciar a su Fe. De él aprendieron la No violencia activa: Mandela, Luther King, César Chávez, Anacleto González Flores, el santo de Tepatitlán, Jalisco, Beatificado por Juan Pablo II en 2005, que para Jean Meyer, autor de La Cristiada (su tesis doctoral en La Sorbona), fue “El hombre que quiso ser el Gandhi mexicano”.
Benedicto XVI, Joseph Ratzinger, en Sobre la Unidad de las Naciones expone que la teocracia griega fue desenmascarada por Sócrates al testificar con su vida que la polis y los políticos manipulaban el cratos (gobierno), con las deidades, como los egipcios, aztecas, y mayas. Al llegar Cristo, el hijo de Dios, “Quien me ha visto a mí, ha visto al Padre, y eso le basta”.
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Los astrónomos de San Pedro Mártir (UNAM), observando el Universo (ya calcularon 400 mil millones de galaxias), dicen: “La astrología es la hija loca, de una ciencia tuerta que es la astronomía”. (Escuche de Serrat “Toco Madera”). Compare a Stephen Hawking con Walter Mercado, o a Carl Sagan con algún otro charlatán. “Todo es igual, nada es mejor, lo mismo un burro que un gran profesor”. (Serrat, “El cambalache”).
De la teocracia la humanidad, gracias a Sócrates, evolucionó a la democracia, ya luego las piltrafas comenzaron a agregarse a la democracia cristiana en Europa y América. Augusto Pinochet (hay más de 40 mil desaparecidos en el desierto de Atacama) quiso besarle la mano al Papa polaco y éste lo rechazo. “Trate bien a su pueblo”, le reclamó Juan Pablo II.
El Sacro Imperio Romano Germánico, Imperio Español, Francés, y recientemente la Reina inglesa han nombrado obispos anglicanos. Y se lleva en su conciencia elApartheid y 30 años en prisión del anglicano líder del Congreso Nacional Africano Nelson Mandela, primer presidente negro de Sudáfrica. Alguien le regaló a Mandela, en la cárcel, El poder del pensamiento tenaz, de Norman Vincent Peale. La Fe lo sostuvo.
Los obispos mexicanos al hablar de la importancia de la participación de los fieles laicos en las elecciones del domingo 2 de junio de 2024, expresan:
“Discernir. Cuando un partido político nos quiere vender una idea injusta y la disfraza de bien común, los católicos tenemos la obligación de acudir al Evangelio, y a las enseñanzas de la Doctrina Social de la Iglesia para decidir en conciencia: ‘La Iglesia no puede ignorar la injusticia social sea del tipo que sea, y los cristianos tienen la obligación de enfrentarse a ella al modo de Jesús. Oramos y nos comprometemos para ser buenos cristianos y buenos ciudadanos’”. (Obispos de León, Irapuato, Celaya y Querétaro, 2024).
Germán Orozco Mora reside en Mexicali, B.C.
