Los estragos de las lluvias continuaron en la ciudad, a pesar de que éstas cesaron desde el 9 de febrero, pues el martes 13 se registró un nuevo deslave en la colonia Racho Las Flores, y durante el pasado fin de semana, un socavón en el malecón de Playas de Tijuana.
La madrugada del martes un talud cedió, a causa del reblandecimiento del cerro a causa de las lluvias, y cayó encima de dos casas en Rancho Las Flores; en total, se tuvieron que evacuar a 22 personas y ocho casas fueron engomadas, tres con sello rojo en la parte de arriba del cerro y otras cinco en la parte de abajo, dos en rojo y tres amarrillos.
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Miguel Ángel Ceballos, director de Protección Civil Municipal, explicó que lo ocurrido en la calle Rancho Macías, de la colonia Rancho Las Flores, no es un deslizamiento, sino una inestabilidad.
“Recibimos un reporte de deslizamiento; ya cuando llegamos aquí nos damos cuenta que es una inestabilidad, como tal, y estamos revisando toda la zona, para ver si se trata de un deslizamiento. Todavía no es un deslizamiento, tenemos una inestabilidad en la parte de arriba; prácticamente fue rellenada la parte de la ladera, en la parte de arriba, y fue lo que cedió”, detalló.
Precisó que la ladera se rellenó de forma artificial, ya que no formaba parte del talud, y con el suelo reblandecido por las lluvias, no estaba compactado como era debido, por lo que cedió.
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Asimismo, durante el fin de semana anterior se registró un nuevo socavón en el malecón de playas de Tijuana, el cual se suma al de Jardines de Bugambilias y al del bulevar Benítez.
Marco Antonio Campoy, director de Obras e Infraestructura Urbana Municipal, dijo a ZETA que el socavón de Bugambilias lleva un 85 por ciento de avance, por lo que se espera que quede listo a fin de mes.
Por otro lado, precisó que el socavón del bulevar Díaz Ordaz, reportado desde las lluvias del 22 de enero, se debió a que la boca de tormenta ubicada frente al soriana quedó destruida por basura, provocando encharcamiento y el posterior desbordamiento del agua, éste podría tardar tres semanas más en ser reparado, ya que depende del pronóstico de lluvia.
En cuanto al nuevo socavón, en el malecón, fue a causa del colapso de un muro de retención, por las lluvias, el cual se estima quede reparado en un mes, ya que también depende del clima de la región, mientras tanto, va un cinco por ciento de avance.
“Las zonas de riesgo, a causa de un socavón, son difíciles de dictaminar exactamente donde se puedan presentar, esto debido a que las principales causas de afectación van desde tuberías quemadas por vandalismo, obstrucciones por basura, o manipulación de canales en tiempos secos”, detalló.
