Con participación de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Mexicali (DSPM), Fiscalía General del Estado (FGE) y DIF Estatal, el 20 de mayo de 2022, DIF Municipal de Mexicali puso en operación el Sistema Municipal de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes (SIMPINNA), pero siete meses después, continúan sin proteger a menores víctimas de explotación laboral en el Estado.
Al anunciar el inicio de operaciones, la directora del patronato de DIF Municipal, Elba Cornejo, ya había referido la localización de 283 niños laborando o pidiendo dádivas en calles cachanillas; a la fecha han detectado alrededor de 600 menores en esas condiciones, pero no han hecho más que contarlos.
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Una de las zonas con alta incidencia detectada de menores laborando o pidiendo dádivas en Mexicali, es el cruce entre Calzada James W. Stone y Bulevar Adolfo López Mateos.
“Luis”, joven estudiante de 25 años que se dedica al espectáculo circense en dicha esquina, comentó a ZETA que diariamente llegan hasta diez menores a ese cruce para limpiar parabrisas y pedir dinero. Por pláticas, sabe que provienen de las colonias Bellavista y Primera.
“Los papás vienen a dejarlos aquí y se van. Algunos los maquillan aquí en la esquina y aquí los dejan”, expresó.
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En los seis meses que lleva trabajando en esa esquina, en ningún momento ha visto a autoridades de DIF Estatal. No obstante, elementos de Policía Municipal acudieron en varias ocasiones, pero sólo les pidieron retirarse del lugar.
En el cruce, dos menores de 16 y 14 años dijeron que sus padres las dejaron en la esquina para limpiar vidrios y ellos se fueron a trabajar. Refirieron ser de Chiapas y tener apenas dos semanas viviendo en la ciudad.
De igual manera, otros dos menores de 8 y 7 años comentaron que sus padres saben que están limpiando vidrios en las calles mientras ellos trabajan. También aseguraron provenir de Chiapas y tener aproximadamente un mes en la ciudad.
Según Elba Cornejo, directora del Patronato DIF Mexicali, el trabajo consiste en localizar a los adultos a cargo de los menores y exigirles acreditar la paternidad de los mismos.
“No podemos asegurar si son explotados o no por sus padres. Sabemos que es una irregularidad, que en nuestro Estado está prohibido que los niños trabajen y, por usos y costumbres de otros Estado, lo hacen. Pero en Baja California eso está prohibido”, expresó.
Además, la Ley de Educación exige a los padres llevar a sus hijos a la escuela.
La directora del DIF Municipal, Karla Edith González Navarro, reveló que al cierre de 2022 detectaron 600 menores laborando en las calles y sólo en dos casos un “posible delito, y fueron remitidos a la Fiscalía General del Estado y a DIF Estatal”, debido a que los supuestos padres no acreditaron en un primer momento tener la patria potestad. Sin embargo, en los dos casos terminaron por regresar a los cuatro menores con los progenitores.
“Tú los encuentras en la calle y haces una intervención. Nosotros nada más hacemos la intervención y les platicamos sobre nuestros programas. No podemos retirar niños, acuérdate que DIF no está para separar familias, está para unirlas”, subrayó la funcionaria.
Según información de DIF Estatal, cerca de 27 niñas, niños y adolescentes fueron canalizados con ellos entre noviembre de 2021 y noviembre de 2022; 24 fueron devueltos a sus padres y tres permanecen en las instalaciones del organismo.
TAMBIÉN INOPERANTE EN TIJUANA
Pese a que el 14 de abril de 2022 se instaló formalmente el Sistema Municipal de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIMPINNA) en Tijuana, conformado por 30 personas y dependencias, ni siquiera se han realizado operativos como el de Mexicali para detectar a niños en situación de calle.
El argumento para no hacerlos es la “falta de protocolo”, declaró el director de DIF Tijuana, Jehu Sánchez, y a decir del funcionario, quedará hasta principios de 2023.
Según cifras de DIF Municipal Tijuana, durante 2022 canalizaron a 325 niños a DIF Estatal, la mayoría por omisión de cuidados, detectados a través de denuncias hechas al 911.
“Estamos trabajando diario por convertir los sueños de niños, niñas y adolescentes en una realidad palpable, hoy marcamos un parteaguas en los derechos y el futuro, a fin de poner fin a la violencia contra ellos e intensificar su cuidado y protección”, aseguró la alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez durante la instalación oficial de la estancia; no obstante, luego de ocho meses, el panorama pinta diferente.
Hasta ahora las acciones no ha llegado “a los niños de y en la calle”, sólo a las aulas, como el taller Mis Derechos, llevado a más de 30 mil niños, así como la realización de 51 foros de participación infantil y visitas a 90 escuelas. Cristian Galarza
