“En un Estado verdaderamente libre, el pensamiento y la palabra deben ser libres”.
-Suetonio.
La libertad de expresión es un derecho humano establecido por el marco jurídico nacional e internacional que comprende tanto la libertad de expresar el pensamiento propio, como el derecho a buscar, recibir y difundir información e ideas. Además, la libertad de expresión garantiza un intercambio de ideas e información que protege tanto la comunicación a otras personas de los propios puntos de vista como el derecho de conocer las opiniones, relatos y noticias que los demás difunden.
Esta libertad tendrá una influencia en los procesos democráticos en una sociedad, al permitir la libre circulación de ideas necesaria para fortalecer la rendición de cuentas y la transparencia, pues sienta las bases del debate público y la participación ciudadana; asimismo, propicia la emancipación intelectual y es un catalizador de todos los demás derechos.
Por lo tanto, la prensa libre es la piedra angular de la democracia para brindar a las personas la información que les ayude a participar en las decisiones públicas; para poder ejercer este papel es importantísimo que el periodismo no se controle o manipule para servir intereses.
Así, para contribuir al desarrollo sostenible, la democracia y la buena gobernanza, se necesita del fortalecimiento de las capacidades de medios libres e independientes; lo que será en sí, síntoma de una sociedad democrática saludable y del desarrollo. Igualmente, es necesario que las personas periodistas gocen de la protección y de la independencia para realizar sus funciones.
El periodismo está vinculado con la libertad de expresión, que como derecho humano es inherente a todas las personas; por ello el periodismo no puede ser separado de la libertad de expresión: ambas cosas están relacionadas, pues en general el periodista es una persona que ejerce la libertad de expresión.
Al respecto, la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que “periodista” es cualquier persona que difunda información con relevancia social, con independencia del medio de comunicación en el que se desempeñe, si está asociado a algún medio de comunicación, o ejerce su profesión en forma independiente, o si realiza dicha actividad de manera habitual o permanente. La definición de periodista debe abarcar los distintos y cambiantes modos con los que se ejerce esta actividad, para permitir acceder a aquellos que ejercen su derecho a la libertad de expresión a través del periodismo a los mecanismos de protección.
Así, por su relevancia que tienen las personas periodistas con la democracia, especialmente en la difusión de la información, la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión establece en el Principio 6: “La actividad periodística debe regirse por conductas éticas, las cuales en ningún caso pueden ser impuestas por los Estados”, por ello es necesario pensar en la responsabilidad social y ética que entraña el desempeño de esa profesión.
Paralelamente, atendiendo a la gran responsabilidad que el periodismo conlleva, el Poder Judicial de la Federación, a través de sus sentencias, ha instrumentado el estándar de la “real malicia” o “malicia efectiva”, conforme a la cual en general, sanciona la emisión de opiniones, ideas o juicios, con información falsa y con la única intención de dañar.
Lo anterior, toda vez que las personas periodistas desempeñan un papel imprescindible en la democracia; por ello la importancia que la información que difundan sea veraz. Consecuentemente, la información destinada a influir en la opinión pública tenga detrás un razonable ejercicio de investigación y comprobación, sin desnaturalizar el ejercicio del derecho humano a la libertad de expresión.
El periodismo es crucial para garantizar que vivamos en sociedades democráticas, justas y pacíficas, por lo que deben poder informar sin temor a represalias. Debemos reconocer a quienes buscan traernos la verdad, quienes todos los días se esfuerzan por lograr que los gobiernos rindan cuentas; y, al hacerlo, protegen nuestros derechos a la libertad de información, de opinión y de expresión.
Se debe valorar el trabajo de las personas dedicadas a ejercer el periodismo como se valora a quien dedica su vida a fomentar la justicia para nuestra sociedad.
Melba Adriana Olvera fue presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Baja California.
Correo: melbaadriana@hotmail.com