Con todo y que el Gobierno Federal eliminó los aranceles a la carne de res y de cerdo, la medida no tendría un impacto importante y directo en la reducción del precio del bistec, filete, diezmillo, molida, lomo y chuleta, indicó Hugo Fragoso Sánchez, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Establecimientos Tipo Inspección Federal (ANETIF).
En un comunicado, Fragoso Sánchez expuso que México no cuenta con acuerdos sanitarios con naciones cuya oferta es importante, como Brasil, por lo que no se pueden importar productos de estos.
Mientras que la importación de carne de cerdo de Estados Unidos y Canadá se hace sin aranceles, y de Europa se publicó una cuota de importación vigente que permite la importación también sin aranceles, pero no ha impactado de gran forma los precios de la carne.
El 16 de mayo, como parte del Paquete contra la Inflación y la Carestía (PACIC), el Gobierno de México emitió un decreto para exentar de aranceles a 21 productos alimenticios, entre los que destacan ciertos tipos de aceite de maíz, atún, carne de cerdo, de pollo y res, frijol, huevo, leche, manzana, jitomate, sardina, harina de trigo, maíz blanco, sorgo y trigo, entre otros.
Según la Secretaría de Economía, el valor de los productos cuyo arancel fue exentado, representa un monto total superior a 8 mil 100 millones de dólares, siendo la carne de cerdo (mil 858 millones de dólares, mdd), el trigo (mil 573 mdd), la carne de pollo (mil 027 mdd), la leche (935 mdd) y la carne de res (919), los de mayor valor.
El miércoles 18, el subgobernador del Banco de México, Gerardo Esquivel, afirmó que la inflación en el país “está en un rango razonable, considerando los factores internacionales, incluso por debajo de otros países”.
Además, “la inflación no está fuera de control, es muy importante que todo el mundo lo tenga claro”, reiteró el funcionario del banco central, al finalizar una reunión con la Asociación de Bancos de México.
Respecto al plan impulsado por AMLO para disminuir la carestía, Esquivel consideró que puede contribuir en una dimensión, y si bien no es la solución, “van en la dirección correcta, y de algo pueden ayudar”.