Ante el cambio del semáforo epidemiológico a “naranja”, el Gobierno del Estado optó por modificar su acuerdo previo de regreso a clases presenciales, y mantendrá el esquema de trabajo virtual de manera indefinida.
El regreso a clases presenciales tendrá que esperar en Baja California, luego de la evaluación realizada por la Secretaría de Salud y Educación, ya que junto con sus homónimos a nivel nacional, se llegó a la conclusión de que no era recomendable el retorno a las aulas.
La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, anunció en días pasados que el regreso a clases presenciales estaba previsto para el 17 de enero, debido a que se tenía que hacer una evaluación de la situación de los planteles educativos.
Sin embargo, el ingreso de la variante ómicron, del novel coronavirus cambió la directriz fijada por el Gobierno de México y el Estatal, por lo que se analizará que el regreso a clases de educación básica, pudiera regresar hasta el mes de febrero o incluso marzo, dependiendo del avance de la pandemia.
En la conferencia de prensa mañanera que llevó a cabo la mandataria estatal, en compañía con varios funcionarios del sector salud, entre ellos el secretario Adrián Medina Amarillas y el titular de epidemiología Óscar Efrén Zazueta, se refirió que la nueva variante cambió los planes en todos los aspectos.
“Un regreso a clases estamos a favor de que regresen ese modelo presencial, pero estamos de la mano con salud, la instrucción es que regresen, seguiremos atendiendo a las escuelas como se ha hecho de manera híbrida, que no se pierda ese contacto, cada vez que salud informe. No hay presencial el 17” refirió la Gobernadora.
Mientras tanto, la Secretaría de Educación continuará rehabilitando las escuelas en espera de que la variante ómicron disminuya sus niveles de contagio. En tanto, el regreso a clases presenciales para educación media superior, previsto para el mes de febrero, sigue en pie, por lo que se reforzarán las medidas para incentivar la vacunación en este grupo etario.
Óscar Efrén Zazueta comentó que nos encontramos en el punto más alto de la pandemia en materia de contagios y se prevé que para el mes de febrero o marzo se puede controlar la curva epidemiológica, sólo en caso de que la sociedad respete las medidas de sana distancia, uso de cubrebocas y otras acciones de aglomeración.
Agregó que el 70 por ciento de las pruebas COVID-19 que se están realizando en clínicas públicas y privadas resultan positivas a coronavirus, y el grupo etario con mayor incidencia es el de la población económicamente activa, pues va de los 20 a 39 y en segundo lugar de los 40 a 59 años.
El Secretario de Salud, por su parte, aseveró que se reducirá el aforo en centros recreativos hasta en un 75 por ciento y la capacidad del transporte público hasta el 50 por ciento dentro de los próximos días, como parte de las medidas del semáforo naranja.
