El gobierno de Estados Unidos autorizó a Petróleos Mexicanos (Pemex) comprar el 50% de las acciones de Royal Dutch Shell de la refinería de Deer Park por un monto total de mil 192 millones de dólares, informó el director de la petrolera mexicana Octavio Romero Oropeza.
“Con el fin de asegurar una transferencia de control exitosa se planea finalizar la compra durante las primeras semanas de 2022”, indicó el funcionario federal, quien afirmó que esta adquisición permitirá que Pemex y México ser dueños de la refinería con la que se logrará la autosuficiencia energética.
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El valor de los activos de la refinería “siguen siendo 596 millones de dólares, que equivalen al 50% de la deuda de la refinería, que es la participación de Shell”, lo que deja a la planta limpia de deudas.
El gobierno mexicano liquidará la deuda de los otros 596 millones de dólares que corresponden a la mitad que le toca a Pemex por su participación del 50 por ciento, lo que significa que “la refinería tenía un adeudo equivalente a su valor por cerca de mil 200 millones de dólares”, explicó.
Dichos recursos provendrán del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin), de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, apuntó el funcionario federal en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, de este 22 de diciembre de 2021.
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La refinería Deer Park está ubicada en Houston, Texas, tiene una capacidad de procesamiento de 340 mil barriles por día; “es la refinería número 16 de 129 que hay en Estados Unidos”, destacó. Está integrada al complejo petroquímico de Shell y tiene capacidad para comercializar productos por buque, ducto y tren.
En 2021 tuvo una capacidad de producción de 131 mil de barriles diarios de gasolinas y componentes, 89 mil de barriles diarios de diésel de ultra bajo azufre, 21 mil de barriles diarios de turbosina y 61 mil de barriles de otros productos, y “no produce combustóleo”.
Con la compra del 49.005% de la refinería de Deer Park, el gobierno mexicano pretende aumentar la venta de combustibles de Pemex, aunque la distribución nacional conllevará costos aduanales y de logística propios de las importaciones.
Las operaciones de la refinería de Deer Park estarán reguladas por autoridades de competencia estadounidenses en un mercado en que podría resultar más rentable vender los productos que se refinen que traerlos a México para su comercialización, añadió.
Recordó que en octubre de 2020 se entregó la oferta inicial a Shell. En enero de 2021 se firmó el acuerdo de confidencialidad entre Pemex y Shell. En mayo pasado se firmó el acuerdo definitivo de compra-venta, el cual estaba condicionado a la autorización del gobierno de Estados Unidos.
“El gobierno de Estados Unidos no identificó riesgos en materia de competencia ni de seguridad nacional. El 23 de julio nos dieron la aprobación de competencia económica y el día de ayer, 21 de diciembre de 2021, nos dieron la autorización en el Comité de Inversión Extrangera de Estados Unidos (CFIUS)”.
“Recibimos la comunicación de ese comité que depende del Departamento del Tesoro tras la revisión que se hizo a partir del 20 de noviembre”, dijo el canciller Marcelo Ebrard, quien aseguró que la aprobación se dio luego que dicho Comité revisó la información que se puso a su disposición. “Después de tomar todas las consideraciones relativas a la seguridad de Estados Unidos ha determinado que no hay ninguna preocupación que pudiera encontrar”.
El presidente López Obrador agradeció a su homólogo Joseph Biden “por su confianza” y a los funcionarios de todas las dependencias del gobierno de Estados Unidos que participaron en esta autorización. Agradecerle a los directivos de Shell por mantener la operación en los términos pactados y decirle al pueblo de México que esto significa tener más capacidad para procesar el petróleo crudo, la materia prima que se extrae de los pozos de nuestro país”.
Con esta refinería de Deer Park, la nueva refinería de Dos Bocas y con la coquizadora de Tula se está incrementando la capacidad de refinación en alrededor de 700 mil barriles diarios, destacó.
A ello se suma la inversión de 10 mil millones de pesos en promedio para la rehabilitación de las 6 refinerías existentes, con lo que se espera que para 2022 se tenga “una capacidad de producción de 1 millón 200 mil barriles más los 700 adicionales. Vamos a estar ya en condiciones de procesar toda nuestra materia prima. Esperemos que esto se pueda concretar para 2023, lo que va a significar producir en México todos nuestros combustibles”, reiteró.
