La autoridad municipal colocó policías para dirigir el tránsito en las líneas de cruce hacia los Estados Unidos, además un cruce “inteligente” y un semáforo para desfogar el tráfico; pero no contaban con la kilométrica demanda por cruzar las garitas ante el levantamiento de restricciones para internarse a Estados Unidos, en viajes considerados como no esenciales
Los kilómetros de fila y horas de espera dimensionan el tamaño de la necesidad de cruzar la frontera de Tijuana a San Ysidro. Desde que se eliminaron las restricciones de cruces no esenciales, quienes cuentan visa de turista se sumaron a la dinámica binacional que llevan los ciudadanos y residentes estadounidenses que duermen en Tijuana y viven en el Sur de California y usaron las garitas durante 20 meses.
La demanda se calculó y se semaforizó la vía rápida para evitar choques y problemas entre automovilistas, incluso se pensó en combatir las extorsiones del llamado “cártel de la línea”. Lo que no se calculó fue la kilométrica demanda. Aunque el lunes 8 de noviembre el día trascurrió en felicidad y agilidad, el martes y miércoles se superó los ocho kilómetros en su momento más complicado. Más de cuatro horas de espera tuvieron que soportar los mexicanos visados, ciudadanos y residentes norteamericanos para pisar suelo americano.
La justificación que la Secretaría de Seguridad Municipal de Tijuana dio a ZETA fue que las inspecciones por parte de Protección Fronteriza (CBP) son más minuciosas ante la alta demanda que se ha registrado, la cual no está cuantificada aún.
De acuerdo a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), hasta el 2019 de registraban más de 114.2 millones de cruces anualmente, cayendo la cifra hasta 34 millones entre los meses de enero y agosto de 2021. El último dato estadístico es el balance de septiembre de 2021 en el que se reportan: 2 millones 302 mil 152 cruces en general por la Garita de San Ysidro y 811 mil 778 por Otay.
Comerciantes de San Ysidro desesperados por clientes mexicanos
Los comerciantes del sur de San Diego esperan recuperarse y vender hasta el 60 por ciento de su mercancía para cerrar el año ante la reapertura de las garitas para cruces no esenciales entre Tijuana y San Ysidro, y así aprovechar las festividades de noviembre y diciembre. El primer día de cruces, hubo quieres ingresaron a California e hicieron fila para ingresar a las tiendas con ofertas.
Desde marzo de 2019, San Ysidro tuvo pérdidas millonarias con el cierre de las garitas que impidieron el paso de sus clientes mexicanos, de los que dependen más de la mitad de sus ingresos. Diferentes cámaras y autoridades calculan que el costo se puede ver en empleos perdidos, negocios cerrados y pérdida de oportunidad durante los 20 meses sin mexicanos.
“Aquí en San Ysidro Boulevard, el 95 por ciento de la clientela son mexicanos, en los Outlets es el 65 por ciento; dependemos del mexicano, para eso estamos en el mapa”, comentó Jason Wells, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de San Ysidro.
En números duros: más de 270 negocios cerraron en San Ysidro que sintieron la caída de 75 por ciento de los visitantes mexicanos, que de cuatro millones en 2019 cayeron a un millón en 2021, lo que se traduce en disminución de la derrama económica de 428 millones de dólares en 2019 a 85 millones en el primer semestre de 2021.
“Una pérdida estimada de un billón de dólares, solo en la pérdida de oportunidad en las tiendas de retail. Sin embargo, tenemos cifras de la autoridad turística de San Diego que nos comentaban que en comparación con años anteriores que, de 428 a 430 millones de dólares de derrama económica de los visitantes diarios de México, este año apenas van 85 millones; es una pérdida de más de 300 millones de dólares”, explicó Kenia Zamarripa, directora ejecutiva de asuntos de comercio internacional de la Cámara de Comercio de San Diego.
“Durante los últimos 20 meses, los negocios que pudieron sobrevivir, están operando al 24 por ciento de lo normal. Por eso, de ventas anuales de 900 millones de dólares, por eso en 20 meses tuvieron pérdidas de 1.3 mil millones de dólares o billones en inglés”, insistió Wells, de la cámara de San Ysidro.
En el Condado de San Diego se calcula que entre marzo 2020 y marzo 2021 hubo pérdida de 650 millones de dólares o un 72 por ciento de bajas, lo que implicó cerca de 2000 empleos perdidos, de los que 89 por ciento estaban relacionados con comercios, educación y turismo. Incluso, se estima que los negocios que sobrevivieron al periodo de restricciones de cruces no esenciales de turistas mexicanos solo obtenían ganancias aproximadas, promedio, del 40 por ciento de lo que acostumbraban en prepandemia.
“Dos mil 200 trabajos perdidos por los cruces fronterizos y 276 negocios que cerraron sus puertas para siempre”, calcula Wells.
“Millones de dólares son los que impactaron en el sur de San Diego. Más de 20 negocios. Es un impacto muy fuerte para la comunidad de San Diego así que estamos muy interesados en que la gente ya pueda cruzar”, explicó Nora Vargas, vicepresidenta del condado de San Diego.
Optimizar y humanizar la frontera
Los alcaldes, de Tijuana, Montserrat Caballero y Todd Gloria de San Diego, coincidieron en la hermandad de ambas ciudades fronterizas y en el momento histórico en el que los intercambios culturales, sociales y económicos se reanudan. Pero los comerciantes buscarán que el gobierno federal de Joe Biden destine los recursos necesarios para atender a los puertos fronterizos garantizando seguridad y agilidad.
“Queremos ir a Washington en marzo para garantizar que haya los fondos suficientes para operar una garita eficiente”, reiteró Kenia Zamarripa, directora ejecutiva de asuntos de comercio internacional de la Cámara de Comercio de San Diego.
“No solamente es lo económico, es que muchas familias no se han podido ver. Muchos, como lo comentaba, muchos tíos, muchos abuelos no han podido cruzar porque no tienen esa habilidad y ahorita que ya van a poder venir, que venga la gente y participe”, explicó Nora Vargas, vicepresidenta del condado de San Diego.
“Con tecnología e infraestructura podremos tener mejores resultados con el proyecto de la Garita Otay 2. Nos estamos coordinando y analizando opciones para agilizar los cruces y que el proyecto sea una realidad”, expuso la gobernadora de Baja California: Marina del Pilar Ávila Olmeda.
Expuso la gobernadora de Baja California que buscarán agilizar los cruces con la construcción del añejo proyecto fronterizo de la garita de Otay 2 en la que la tecnología permitirá hacer que algunos carriles sean de peaje y agendar horarios para cruzar.
