Legislación deficiente, miles de reportes de “tienditas” acompañados de apenas 150 cateos, y la nula estrategia contra las adicciones por parte de las autoridades, han dejado al narcomenudeo en “terreno de nadie”, según comentó el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, José Manuel Hernández Niebla
En los temas de las adicciones y el narcomenudeo, los cuales están vinculados al 70 por ciento de los crímenes en la entidad, las autoridades en Baja California no cuentan con un sistema definido para combatirlos; ni siquiera existen estudios o análisis de la incidencia delictiva al respecto, según el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, Juan Manuel Hernández Niebla, quien considera, los dos fenómenos delictivos están en “terreno de nadie”.
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Efectivamente, los criminales aprovechan los huecos legales y criterios de oportunidad para continuar la distribución y venta minoritaria de enervantes, sin ser encarcelados.
Miles de reportes, menos de 150 cateos
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Ciudadanos han reportado 3 mil 396 sitios de venta de droga en la entidad, algunos de ellos repetidos y la mayoría ubicados en Mexicali. Esto permite al Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C4) definir un mapa de las diversas “tienditas”, comentó el director Sergio García Aceves, quien agregó que dicha información es turnada normalmente a la Policía Estatal Preventiva (PEP) o al Ejército, para que lleven a cabo las diligencias en primera instancia.
Esta información es cotejada por elementos estatales que definen su operación y -en teoría- turnan los datos al área de narcomenudeo de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), encargada de solicitar la orden de cateo.
Sin embargo, de los más de 3 mil reportes, solo 150 han culminado en cateos por parte de la PGJE; del resto nadie sabe nada.
David Lozano Blancas, coordinador de la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales (SIE), expuso que de estos “reventones”, 55 ocurrieron en Mexicali, 50 en Tijuana y el resto en Ensenada, donde en el 95% se logró ubicar droga.
Sin embargo, cuestionado por el origen de los datos para llevar a cabo una investigación, dijo que en la mayoría de sus cateos las diligencias son realizadas por los agentes del área de Narcomenudeo, a raíz de otros expedientes en su mayoría, y otros tantos por parte de los reportes de la Secretaria de Seguridad Pública del Estado (SSPE).
Foto: Eduardo Villa .- Alonso Ulises Méndez, director de la Policía Municipal de Mexicali.
Esto quiere decir que la ubicación de las “tienditas” de droga son turnadas a la PEP o a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y llevan a cabo una previa investigación de campo. Tras entrevistar o detener a personas, realizan un informe policíal que es entregado a la PGJE, la cual solicita una orden de cateo.
Sin embargo, la efectividad en este tema es muy escasa si se compara con el reporte ciudadano del que, según Sergio García Aceves, solo el 5% es falso, lo que quiere decir que existe un mapeo claro de la ubicación de los establecimientos de droga, pero corresponde confirmarlos a la PEP, la institución con menos personal policíaco en el Estado.
El funcionario del C4 indicó que algunos de estos reportes son realizados por criminales que incluso confiesan su nombre, se identifican para qué cartel trabajan y hasta les mandan mensajes a las personas que detendrán, pero debido a que se trata de un llamado del 089, es imposible ubicarlos, por lo que se limitan a investigar.
Sobre la ubicación de “tienditas” de droga y detenciones de narcomenudistas, Alonso Ulises Méndez afirmó que la mayoría de estas se encuentran en la periferia de Mexicali. Comunidades como Santo Niño, Valle del Pedregal y Lomas Altas, son los puntos de mayor presencia de expendios de enervantes, lo que es directamente proporcional a las cifras de incidencia delictiva.
Agregó que la situación es peor, debido a que la principal droga en las calles es la metanfetamina, la cual genera afectaciones no solo físicas, también psicológicas.
A diferencia de la marihuana e incluso la cocaína, los estupefacientes sintéticos provocan alteraciones severas en el organismo de las personas, que las orillan a cometer crímenes para poder obtenerla.
El 50% de la droga que se incauta en las calles es “cristal”, el cual está ligado a la criminalidad en las colonias.
Se dicen “adictos”, pero son vendedores
Méndez Manuell-Gómez, señaló que se enfrentan ante un rival muy complicado debido a que la legislación exagera en algunas medidas; es demasiado permisiva.
Aseguró que desde que la Ley General de Salud elevó las cantidades de estupefacientes que pueden ser portadas para consumo, abriéndose una gran posibilidad de venta. Los portadores se escudan en tener un problema de adicciones, son liberados o no se ejerce acción penal en su contra.
“Nos hemos ido en exceso en el uso de las drogas. Las tablas de la Ley General de Salud establecen que se han ido en cantidades muy altas; el narcomenudista controla esta distribución. Sale y venden ocho dosis y regresan, vuelven a hacerlo”.
En otras palabras, los narcomenudistas saben cuánta droga deben llevar para no ser considerados vendedores de droga, sino adictos, por lo que en lugar de cargar con 50 dosis de enervante metanfetamina, cargan con siete u ocho, y cuando las venden, regresan a su vivienda y vuelven a abastecerse con cantidades similares.
Asimismo, con menos de dos gramos pueden abastecer a varios individuos, ya que con frecuencia es “cortada”, lo que genera mayores ganancias para los vendedores, pero al momento de revisar la composición, no toda corresponde a la sustancia ilegal.
El director de la Policía Municipal aseveró que solo en un mes pueden turnar a 300 personas por posesión de enervantes, pero la mayoría queda en libertad.
Por su parte, el coordinador de la SIE en Mexicali argumentó que en la Capital se cuenta con mil 586 actas derivadas de detenciones por posesión o narcomenudeo, en Tijuana son 2 mil 045 y en Ensenada 436, pero solo un pequeño porcentaje terminó frente al juez.
De hecho, solo en 98 casos se ejerció acción penal en Mexicali, 241 en Tijuana y 92 en Ensenada. La explicación es que en estos casos se da un criterio de oportunidad al que pueden acceder por no ser reincidentes.
En caso de que una persona sea detenida en dos o tres ocasiones, se turna ante el juez, pero aun así existe la posibilidad que este determine que no haya pena privativa de la libertad.
Méndez Manuell-Gómez destacó que el 50% de los detenidos por sus agentes en posesión de narcóticos, ha sido aprehendido anteriormente por el mismo delito y con frecuencia llegan a capturarlos cinco, seis o hasta siete veces, desconociendo los motivos por los que recobran su libertad de forma tan rápida.
Lozano aseveró que el Nuevo Sistema de Justicia Penal (NSJP) – que ya no es nuevo en Mexicali, pues tiene siete años activo- es muy garantista y da este tipo de facilidades a los detenidos, sobre todo a los que poseen drogas, ya que son considerados enfermos y no criminales.
Desinterés del gobierno en combate al narcomenudeo
Para el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública (CCSP), José Manuel Hernández Niebla, no existen estrategias ni interés por parte de las autoridades para combatir el narcomenudeo en la entidad, ya que la droga sigue encontrándose en grandes cantidades.
Anteriormente había grandes decomisos de droga por parte de todas las corporaciones de seguridad, pero en la actualidad solo la PEP mantiene un combate directo contra este sector.
Criticó que las autoridades ministeriales y municipales no han tomado acciones en este tema, lo que se ve reflejado en la presencia de drogas en las calles.
David Lozano Blancas, coordinador de la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales
Esto puede explicarse, en cierto modo, porque el C4 envía toda la información a la PEP, y no a otras dependencias. De hecho, Sergio García Aceves declaró que todo lo referente a “tienditas” se turna a la Policía Estatal, mientras que la intervención o transacciones directas en la vía pública, son canalizadas a la Policía Municipal.
Hernández Niebla aseveró que todo mundo -incluido el CCSP- se ha enfocado en los delitos del fuero común como homicidios y robos, pero se debería dar una verdadera atención en el tema por parte del Sector Salud, que prácticamente se ha desentendido del tema cuando debería ser una figura protagónica en el combate a las adicciones.
“Es problema de las adicciones. No tenemos un estudio que nos diga cómo se ha comportado el fenómeno de las adicciones; segundo, no tenemos programas reales de prevención”, reconoció, además de criticar que la ciudadanía está denunciando, pero la autoridad no está respondiendo, lo que poco a poco ha generado desinterés en la ciudadanía por participar en las acciones de gobierno en el combate al crimen.
“El narcomenudeo es terreno de nadie, nadie le presta la suficiente atención”, comentó el presidente del CCSP, quien culpa a la Federación por dejar vulnerables a las autoridades estatales en el combate el narcomenudeo, al transferirles más responsabilidades, pero no más recursos para combatirlas. En Mexicali solo hay 12 agentes ministeriales atendiendo diligencias de narcomenudeo, cuando recibe miles de reportes y detenciones al año.
