En ridículo quedó el grupo de Robos de la Policía Ministerial del Estado, luego que un individuo, cuya detención se anunció con “bombo y platillo”, recobrara su libertad en dos ocasiones, debido a errores procesales.
Víctor, conocido como “El Gordo”, fue detenido la semana pasada acusado de encabezar una banda de asaltantes, a la que se le atribuyen importantes atracos, como el ocurrido contra empleados de Sorteo Tec, la taquilla de “El Buki”, en el hotel Real Inn y en una casa de cambio de la ciudad. En dichos atracos se llevaron una cantidad superior al medio millón de pesos.
Pero, en la misma semana ingresó y salió de la cárcel en tres ocasiones, luego que el defensor particular desacreditó las pruebas; por lo que, cuando fue presentado ante la jueza Sara Pardomo, ésta desechó la prueba fundamental, argumentando que la hora de captura y la del video no coincidían, tomándola como viciada.
El grupo de Robos de la Policía Ministerial logró otra orden de reaprehensión durante el proceso de liberación; de modo que, apenas pisó la banqueta, se le detuvo por el mismo hecho delictivo. El martes se llevó nuevamente la audiencia de vinculación a proceso, por el mismo hecho, pero la jueza encontró nuevas irregularidades, dejándolo en libre una vez más.
En ridículo quedó el grupo de Robos de la Policía Ministerial del Estado, luego que un individuo, cuya detención se anunció con “bombo y platillo”, recobrara su libertad en dos ocasiones, debido a errores procesales.
Víctor, conocido como “El Gordo”, fue detenido la semana pasada acusado de encabezar una banda de asaltantes, a la que se le atribuyen importantes atracos, como el ocurrido contra empleados de Sorteo Tec, la taquilla de “El Buki”, en el hotel Real Inn y en una casa de cambio de la ciudad. En dichos atracos se llevaron una cantidad superior al medio millón de pesos.
Pero, en la misma semana ingresó y salió de la cárcel en tres ocasiones, luego que el defensor particular desacreditó las pruebas; por lo que, cuando fue presentado ante la jueza Sara Pardomo, ésta desechó la prueba fundamental, argumentando que la hora de captura y la del video no coincidían, tomándola como viciada.
El grupo de Robos de la Policía Ministerial logró otra orden de reaprehensión durante el proceso de liberación; de modo que, apenas pisó la banqueta, se le detuvo por el mismo hecho delictivo. El martes se llevó nuevamente la audiencia de vinculación a proceso, por el mismo hecho, pero la jueza encontró nuevas irregularidades, dejándolo en libre una vez más.