Es correcto apuntar la mirada al adeudo tributario de Ricardo Salinas Pliego de 67 mil millones de pesos después de un ajuste del SAT, quien ha de ser uno de los principales personajes a los que envanece violar la ley y priva a millones de mexicanos de sus derechos humanos y sociales (agua, educación y salud).
En marzo de 1999, Salinas Pliego recompró Salinas y Rocha por 78 mmdd; es decir, sólo 15 por ciento de lo que el Estado pagó a los bancos (los 500 millones de dólares mencionados) por la deuda de esa empresa. Así, sumó a su corporativo cerca de 100 tiendas. Asumió la diferencia el “ogro” del empresario de microabonos y agiotismo.
Los primeros ejemplos se encuentran con Carlos Slim con Telmex; Ricardo Salinas Pliego con TV Azteca; Germán Larrea con Ferrocarriles de México; y Roberto Hernández en la banca. “Las empresas de Slim tienen concesiones en todos los sectores en los que la Constitución lo tolera”, precisa.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) cobrará más de 2 mil 636 millones de pesos a Grupo Elektra por deducciones ilegales del Impuesto Sobre la Renta (ISR) que datan de 2006, una vez que reciba la notificación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que rechazó un amparo interpuesto por la empresa propiedad de Ricardo Salinas Pliego y la sentenció a pagar.