La FGE reconoce el ataque con drones provocó daños materiales y hasta el momento no hay personas responsables por el "incidente", como catalogaron las autoridades en un comunicado de prensa.
Mientras el consulado de Estados Unidos emitió una alerta de seguridad y el Consejo Ciudadano de Seguridad pide la presencia del secretario Harfuch; la presidenta evade pronunciarse sobre los ataques contra la FGE en Baja California.
Hubo daños contra cuatro vehículos dentro de los patios de la fiscalía especializada contra secuestros en Playas de Tijuana y el caso estaría relacionado con los otros dos ataques registrados en septiembre.
Mexicanos al grito de guerra; le hicieron honor dos senadores: Noroña y Alito, justo al terminar el Himno Nacional, quienes representan a la ciudadanía que votó el pasado 2 de junio del 2024 (no puse pueblo, porque es frase trillada de AMLO y Sheinbaum).
El ataque con drones en las instalaciones de la FGE en Baja California es el tercer acto violento en contra de oficinas de seguridad del gobierno de Marina del Pilar Ávila Olmeda en menos de un mes.
Esa es la pregunta ante tantas sospechas, denuncias e investigaciones de presuntos actos de corrupción cometidos aquí y allá, en todos los niveles del gobierno morenista, desde “abajo y hasta arriba”.
Durante la última semana de septiembre, presuntos residentes de la colonia Magisterial en Playas de Rosarito convocaron a los colonos a participar en la elección del “presidente del comité vecinal”. Los entusiastas acudieron a la invitación, ya que se suponía que se elegiría al líder de la colonia, a quien podrían expresar las problemáticas que enfrentan como habitantes, entre las que se encuentran la inseguridad, el alumbrado, entre otras.