“Izquierda” y derecha “olvidando sus divergencias” han unido sus voces plañideras condenando el susodicho “atentado”. Ningún ciudadano juicioso, ningún proletario consciente, mucho menos un verdadero comunista se tragarían ese reaccionario cuento.
Tanto la panista Xóchitl Gálvez como la AMLO-morenista Claudia Sheinbaum, predican independencia, libertad y soberanía, pero los hechos -los irrefutables hechos, como decía el gran Lenin- nos muestran que esa retórica es pura verborrea patriotera para cautivar a inocentes. Tanto una como la otra son unas despreciables vendepatrias. A ultranza.
El reaccionario dúo ya se frota las manos. Bonilla, dispuesto a ocupar seis años más, una de las poltronas de la cueva de venenosos alacranes que es la Cámara de Senadores; y su fiel lacayo, Marco Antonio Blásquez Salinas, listo para empuñar el látigo de la presidencia municipal de la ciudad de Tijuana.
El reaccionario dúo ya se frota las manos. Bonilla, dispuesto a ocupar seis años más, una de las poltronas de la cueva de venenosos alacranes que es la Cámara de Senadores; y su fiel lacayo, Marco Antonio Blásquez Salinas, listo para empuñar el látigo de la presidencia municipal de la ciudad de Tijuana.
Gaza, un territorio de 360 kilómetros cuadrados con alrededor de dos millones de habitantes no se ha rendido ante los nazifascistas israelíes. Admirable y ejemplar ha sido la lucha revolucionaria de la resistencia palestina.
La clase obrera pronunciará su dictamen de manera contundente: ¡Abajo con el reaccionario circo electorero! Y lo hará a través del abstencionismo. Boicot espontáneo que será mayúsculo. Como lo ha sido en la mayoría de las ocasiones en que la burguesía ha levantado su carpa circense.
Ni ayer el generalote priista Lázaro Cárdenas, ni hoy el reaccionario parlanchín morenista López Obrador, se mordieron la lengua. Los reaccionarios vendepatrias en el poder no sólo han entregado el petróleo. Sátrapas priistas y panistas y otros del mismo pelambre han sido rastreros lacayos de los imperialistas. Principalmente norteamericanos.
Echarle mendrugos (“apoyos”) a las masas proletarias paupérrimas no quiere decir que el régimen colonial burgués se haya transformado, que la bestia se haya corregido. El construir modernas y colosales obras como el Tren Maya, la Refinería Dos Bocas, el Tren Transísmico, el Aeropuerto Felipe Ángeles, etcétera, no significa que la clase obrera será la beneficiada con tales edificaciones.
Somos de la opinión de que la “desaparición” en el mar de los siete quintos, con todo y uniforme (incluso con las botas puestas), tiene toda la impronta de haber sido la consecuencia mortal de un adiestramiento kaibil. De un “ejercicio de resistencia” a la que son sometidos los referidos militares novicios.
En las últimas semanas se ha conocido la noticia de la reaparición, en la ciudad de Mexicali, Baja California, de la rickettsia, una vieja y mortal enfermedad que ataca a las masas pobres. Fundamentalmente.