El protagonismo de Carlos Beristain y Ángela Buitrago, fue un elemento que contribuyó a la politización del caso y no se apegó a los procedimientos técnicos. Incluso, el grupo de expertos, le dio un sesgo a la información que proporcionaban a la opinión pública y a los padres de los normalistas.
En su momento, en este mismo espacio comentamos que el Gobierno Federal le apostaba al tiempo y al olvido en la desaparición en 2014 de los 43 estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero, conocido como el Caso Ayotzinapa.