Con tan solo dos médicos generales fijos -y Psyche Calderón como Directora de la Alianza de Salud para Refugiados en Tijuana-, es como opera el pequeño consultorio médico en el que se atiende a mil migrantes al mes, y a 40 miembros de la comunidad LGBT+, quienes no cuentan con los medios para pagar consultas privadas y en ocasiones no son debidamente atendidos en los hospitales locales.