La desesperación de Jaime Bonilla Valdez y de sus más cercanos colaboradores -por no decir socios o cómplices- los hace cometer tremendos actos de torpeza. El 20 de septiembre, el diputado y ex secretario del Trabajo, Sergio Moctezuma Martínez, presentó una iniciativa ante la Oficialía de Partes del Poder Legislativo para -básicamente- privatizar las prisiones de Baja California, algo que aquí ya habíamos anticipado
Esta semana, en una gira por Ensenada, el gobernador Jaime Bonilla Valdez utilizó de nueva cuenta su tribuna para hostigar a un comercio y hacer apología del delito. Se trata del restaurante Casa Magnolia.
En un domicilio ubicado en las inmediaciones de la colonia Montecarlo en Playas de Rosarito, habitan dos perros, un Pastor Belga y un Husky Siberiano. Su propietario es un policía municipal adscrito al quinto municipio. No habría problema alguno si las mascotas estuvieran bajo resguardo del dueño, identificado como Israel Gallo.
Durante la semana que termina, el conductor -no periodista- Edgar Ponce, titular del espacio matutino de noticias de Canal 66, se enganchó, desafortundamente, en una discusión de muy poco nivel con su compañera Andrea Celeste.
El Lector se habrá dado cuenta o no, pero un gran sector del morenismo se manifestó a favor de la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en torno a la despenalización del aborto, sentencia que representará una directriz para los estados y su legislación al respecto.
Apenas habían contactado a Ricardo Iván Carpio Sánchez por Catalino Zavala, miembro del equipo de transición del Estado y uno de los reclutadores de personal para la administración de la gobernadora electa, Marina del Pilar Ayala, cuando los actuales jefes y empresarios que han vivido de los contratos de gobierno durante sexenios, empezaron a escuchar pasos.
Miguel Ángel Badiola, el publirrelacionista de Jorge Hank Rhon y además encargado de delegaciones de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), se aventó otra de sus preopotencias.
El penúltimo negocio -porque el último será hasta que se vayan del gobierno, el 31 de octubre de 2021-, ya se les ocurrió a quienes trabajan en el Gobierno del Estado.