El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, sostendrá una reunión este viernes con su homólogo estadounidense, Howard Lutnick, para buscar un acuerdo con el que México sea excluido del incremento al 50% del arancel al aluminio y al acero.
Un trato similar al convenido con Reino Unido, que mantendrá el arancel al 25% hasta el 9 de julio próximo, salvo que Lutnick lo revierta por incumplimiento. El propio secretario de Comercio estadounidense reconoció los avances con Reino Unido y México, refirió Ebrard en entrevista radiofónica.
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“Mandamos supervisar hasta las plantas de acero en países tan distantes como Malasia, Vietnam”, para ver si efectivamente cumplen con las normas. Estados Unidos no lo ha hecho, entonces México ha cumplido con todos los puntos que se han abordado en mesas de trabajo bilaterales”, indicó.
Luego de que el 4 de junio entró en vigor el aumento del 25 al 50% del arancel al aluminio y al acero procedente de todos los países salvo Reino Unido, la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo calificó de “injusta y sin sustento legal” la medida. Si no se llega a un acuerdo bilateral, se tomarán “medidas” para proteger a la industria nacional, amagó horas antes de que se reuniera con empresarios del sector.
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Roberto Fuentes Contreras, profesor investigador de la UABC, señaló que el arancel impuesto por EUA es una medida “recaudatoria” para financiar “el gran y hermoso proyecto de ley” que pretende proteger su industria de acero y aluminio, utilizando el argumento de seguridad nacional.
México exporta a Estados Unidos 7 mil 800 millones de dólares de acero, y alrededor de 2 mil 600 millones de dólares de aluminio. Aunque 82% de esas exportaciones va a EUA, éstas no representan más del 5% de todas las exportaciones mexicanas a la Unión Americana.
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El riesgo mayor del arancel al aluminio y al acero es la afectación que tendría en las cadenas de suministro de diversas industrias, particularmente la automotriz, que es una de las que requiere más insumos de esos materiales, y que el presidente Trump aspira a que se relocalice en su territorio.
El martes pasado, la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) lamentó y rechazó la “injustificada” decisión del gobierno de EUA de imponer y aumentar el arancel de acero proveniente de México.
En el comercio bilateral de acero, Estados Unidos tiene un superávit de 4 mil millones de dólares en productos terminados; el cual aumentará en 2025 ante la caída de exportaciones mexicanas. Tan sólo en abril y mayo las exportaciones de acero mexicano disminuyeron en 50%, expuso.
A los aranceles al aluminio y al acero se suma la entrada en vigor del arancel del 20.91% al tomate mexicano, prevista para el 14 de julio próximo. Al cierre de edición había expectativa entre los empresarios mexicanos sobre una reunión que tendrían funcionarios mexicanos y estadounidenses.
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