La reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) vuelve a ser tendencia, siendo un anhelo de las y los sudcalifornianos que en 2012 sufrieron el impacto de un incremento de hasta el 8% tras la reforma hacendaria del expresidente Enrique Peña Nieto.
Perdiendo el beneficio fiscal que dio competitividad durante décadas a empresarios sudcalifornianos y población en general, personajes como el ahora gobernador del Estado, Víctor Castro Cosío, usaron el tema en campañas políticas al prometer lograr la disminución del IVA, hecho que ahora parece estar fuera de agenda.
Es en este momento el diputado federal del Partido Acción Nacional (PAN), Francisco Pelayo Covarrubias, quien trae de nuevo a la mesa el debate al proponer en el Congreso de la Unión una reducción del IVA para Baja California Sur.
Pelayo Covarrubias argumentó que la Ley de Ingresos de este año no responde a las necesidades de la entidad, lo que pone en desventaja a la población sudcaliforniana. Por ello propuso un IVA diferenciado para el estado, solicitando que baje a un 11 u 8%.
“Beneficiaría directamente a las familias y pequeños negocios; es momento de una reforma fiscal que impulse la competitividad, combata la inflación y genere más oportunidades para todos”, expuso.
El legislador recalcó que la Media Península es la entidad federativa donde se paga todo a un mayor precio por su condición insular.
“Es indispensable, sin duda, compañeros diputados nivelar las condiciones para fortalecer nuestra competitividad regional. Por ello, mi propuesta incluye la implementación de estímulos fiscales y la reducción del IVA al 8% o mínimo al 11”, expresó.
“Como estábamos antes, este cambio sería un motor para combatir la inflación, al reducir costos se beneficiaría directamente a la familias y pequeños negocios sus californianos”, añadió.
No obstante, “del otro lado del charco”, el sector empresarial ve complicado que esta iniciativa sea una realidad, incluso al grado de señalar que “no se necesita”, como es el caso del presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Paul Valdiviezo.
“Realmente nosotros sí lo vemos complicado que se pueda dar, porque como lo he comentado, a Baja California Sur siempre le ha ido bien en los puntos de la media nacional de crecimiento tanto en Producto Interno Bruto como en inflación”, comentó.
“Hablando de desarrollo inmobiliario, hablando de desarrollo de inversión directa extranjera, realmente el impacto de la disminución del IVA no lo vemos tan muy aplicado o necesitado, que lo necesite el estado”, declaró.
Recordó que hicieron una propuesta para que el IVA bajara, pero en entidades de la frontera sur, donde hay índices de pobreza más bajas.
Insistió en que Baja California Sur, con el detonamiento que presenta y las oportunidades y facilidades que ha dado el gobierno para que las inversiones se sigan dando, es un tema que no hay que perder de vista, pero tampoco es una prioridad para el desarrollo económico sudcaliforniano.
Por su parte, el presidente delegacional de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), David Gracia Hinojosa, coincidió en que hay baja probabilidad de que el régimen fiscal cambie para el estado.
Por lo que considera que, aunque sería benéfico que el IVA disminuyera, el sector restaurantero ha procurado enfocarse en otras propuestas, como el trabajo coordinado con autoridades.
“Claro que siempre vamos a estar a favor de un ajuste en el porcentaje de IVA que pagamos aquí en la entidad; estamos desconectados de las vías transporte principales del resto del país, todo tiene que cruzar por barco o subir y bajar por la transpeninsular, lo que incrementa nuestros costos”, dijo.
“Estamos a favor de un ajuste, que lo veamos probable al corto plazo es otro tema. La verdad que lo vemos complicado, por lo que, si bien no quitamos el dedo del renglón en ese tema, también apostamos a otro tipo de apoyo o trabajo en equipo”, externó.
El líder del sector subrayó que, si habrá aumentos, como los que se advierten para este arranque de 2025, es necesario ver qué se puede hacer para que los negocios no cierren y puedan seguir teniendo las fuentes de trabajo.