Con toda razón la gente tiene temor de usar los medios electrónicos, ya sea para comunicarse o para realizar operaciones comerciales, como la compraventa de bienes y servicios.
Prácticamente todos los días recibimos mensajes de nuestros amigos, mediante los cuales nos advierten que han sido víctimas de algún tipo de abuso cibernético.
En muchos de los casos, se refieren a que les “hackearon” su cuenta de la aplicación de mensajería WhatsApp o su red social Facebook. (Hackear, según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española: “Del inglés to hack, jaquear o pi-ratear”. Ver en https://dle.rae.es/hackear?m=form)
Pero independientemente de cómo se diga o escriba, quienes sufren el robo de su cuenta con toda razón se encuentran molestos y además apenados, porque en su nombre, los ladrones, que usurpan la identidad del usuario, lo hacen con el propósito de utilizar la imagen y nombre de la víctima para tratar, de alguna manera, de sorprender a las personas cuyos datos de contacto se encuentran -mediante el hackeo- a disposición del delincuente, quien empieza a tratar de agarrarlos desprevenidos, intentando conseguir beneficios económicos.
En el caso del pirateo de la cuenta de WhatsApp, los pillos inventan historias conmovedoras para tratar de que los mencionados contactos apoyen con dinero supuestamente al titular de la cuenta robada; y desgraciadamente, en muchos casos lo logran.
La forma más común para robar la cuenta es que el usuario caiga en la trampa puesta a través de un hipervínculo (un link, o atajo), pero hay otras formas de que los hackers logren su propósito.
Por otra parte, de acuerdo a la CONDUSEF (Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros), el fraude cibernético aumentó, al registrar un millón 577 mil 987 reclamaciones, por un monto de dos mil 520 mdp. (https://www.condusef.gob.mx/?p=contenido&idc=448&idcat=1)
El 92 por ciento de fraude cibernético se da a través del comercio electrónico.
La CONDUSEF dio a conocer que durante el primer semestre de 2017, se registraron 3.3 millones de reclamaciones por fraude en el sector bancario, es decir, prácticamente 19 mil por día, lo cual representa un aumento de 25 por ciento respecto al mismo periodo del 2016.
El monto reclamado en el periodo citado asciende a siete mil 47 mdp, del cual únicamente se abonó el 57 por ciento al usuario, registrando un 84 por ciento de resolución favorable.
Las instituciones que registraron un mayor número de quejas por posibles fraudes en el primer semestre fueron: Bancomer con el 26.4 por ciento, CitiBanamex con el 20.14 por ciento, Banorte IXE con 18.14 por ciento, Santander con 15.94 por ciento e Inbursa con 5.44 por ciento.
¿Qué hacer al respecto? Ya que no podemos quedarnos aislados, sin usar el ciberespacio, es indispensable que nos capacitemos para evitar ser víctimas, a la vez que compartamos la capacitación con nuestros círculos de afectos, para que ellos tampoco caigan en las garras de los ciberdelincuentes.
Todo es cuestión de protegerse del fraude cibernético.
Alberto Sandoval ha sido profesor, servidor público, consultor, conferencista, deportista y activista ciudadano.
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