En noviembre de 2021, Montserrat Caballero Ramírez tomó protesta a Juan José Rangel Trujillo como delegado de La Mesa. El abogado de profesión debía atender algo así como 180 colonias que conforman la demarcación, mantener los servicios públicos eficientes -recolección de basura, bacheo en las calles, limpieza y orden de la comunidad-, pero nada de eso. La Mesa está sucia, llena de hoyancos sus calles y sin mantenimiento. Resulta que en marzo, el comodino de José Rangel solicitó licencia al cargo de delegado no porque sea candidato a algo, sino porque está esperando que se caiga la candidatura de Ismael Burgueño a la alcaldía de Tijuana. En sus sueños guajiros, cree que una vez retirado Burgueño, la nominación de Morena se la darán a la alcaldesa Caballero y él estará listo para integrar la planilla de regidores. Ahora sí que en Morena las traiciones están al día, especialmente entre quienes, como Juan José Rangel Trujillo, le apuestan a la caída de Burgueño para construir sus candidaturas. El problema es que La Mesa está en pésimas condiciones porque, como el delegado no quiere soltar el hueso, solicitó licencia… y que se perjudiquen todos, pues.