El programa para reusar 700 litros por segundo de agua tratada de las plantas Arturo Herrera y La Morita, en Tijuana, quedaría concluido en 2027, según proyecciones de la Secretaría para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua (Seproa) de Baja California.
Mientras que, los 800 litros por segundo de agua residual a tratarse en la nueva planta de San Antonio de Los Buenos (cuya construcción concluirá antes de que termine el sexenio a manos del Ejército) seguirá vertiéndose al mar hasta en tanto se busque un mercado adónde mandarla.
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En Tijuana el reúso de agua tratada es incipiente, de 1% del total, y se utiliza sobre todo en obras de construcción. “Para atender el reúso se tiene que atender primero la infraestructura”, manifestó Víctor Daniel Amador Barragán, titular de Seproa.
Mencionó que ya se trabaja con industrias que pueden utilizar el agua de reúso en sus procesos teniendo un descuento de hasta 30% en el costo; sin embargo, cuando no se carece de infraestructura se pide a la empresa que apoye poniéndola, “algún tramo del emisor”.
Octavio López director de la asociación civil Nación Verde consideró como una pérdida que después de tratarse el líquido se vierta al mar, ya que el líquido puede utilizarse en jardinería y procesos industriales, entre otros ámbitos. No obstante, señaló que se requieren inversiones “muy fuertes” y no son prioritarias para el gobierno, porque no es algo que se vea.
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Pero “el día que se descomponga el Acueducto y que se acabe la reserva que tenemos en El Carrizo, no va a haber agua, y ahí sí, ¿qué vamos a hacer?, porque el agua de los pozos de la ciudad no da para abastecerla, entonces tenemos que ver cómo reutilizar y ser más eficientes”, señaló este 8 de marzo de 2024.
Durante una reunión con integrantes de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) un participante manifestó que fue suspendido el proyecto ejecutivo de la línea morada, para bombear el agua tratada de la planta de San Antonio de Los Buenos a Valle de Las Palmas, y manifestó la disposición de que puedan participar socios en obras conexas de dicha planta “aunque sea con el 50% del anticipo”.
Sobre ese punto, Gabriel Vizcaíno, presidente de la CMIC, coincidió en la necesidad de que se reúse el agua, porque en muchas partes del mundo así se hace, incluso para consumo humano. Además, mostró su desacuerdo con que la construcción de la planta de San Antonio de Los Buenos la esté construyendo la Sedena, “porque no hay ni la derrama económica, ni la generación de empleos que nosotros como empresas pudiéramos hacer localmente”
Amador Barragán señaló que el Acta 328 firmada por CILA, cuyos proyectos está ejecutando la CESPT equivale a una inversión de 9 mil millones de pesos.
