Al sufrir Guerrero la despiadada furia de Otis, pocos pueden negar, 1) que fue un evento atípico transformado en pocas horas a la categoría 5, imposible de hacerle frente; 2) que nuestros gobiernos sí estuvieron recibiendo desde el lunes 23 alertas del Centro Nacional de Huracanes EE.UU. y del Servicio Meteorológico Nacional de México. Continuaron esos avisos por más de 24 horas, sin que se avisara a la población.
Todas las descalificaciones e insultos acostumbrados del señor AMLO no borrarán la negligencia que resultó criminal. Como también lo fue el intentar hacer a un lado a los Organismos No Gubernamentales para que acercaran ayuda. Menos mal que la Cruz Roja Mexicana, no se dio por enterada y llegó con importante apoyo a Acapulco. Incluso el Presidente reculó sobre el veto a los organismos sociales. Debemos seguir apoyando con todo lo que podamos. No hay ayuda pequeña… todo importa.
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Regresando a Tijuana, nuestra querida ciudad que cada día está más sucia y mal oliente. Y en esto mucho tiene que ver la Secretaría de Obras y Servicios Públicos. Admitiendo que no hay presupuesto que alcance, en estos gobiernos de la 4T se han olvidado de los inspectores ciudadanos que tan bien funcionaron en el pasado. El reglamento de limpia espera que algún funcionario lo descubra. Ya aquí lo hemos mencionado: en su artículo 18 obliga a limpiar diariamente las banquetas y parte de la calle que les corresponda.
Y en el artículo 41 prohíbe colocar cualquier tipo de anuncio sobre áreas públicas, incluyendo puentes, árboles, postes, jardineras y mobiliario urbano. Para colocar los anuncios de “se renta”, “se vende”, “se busca”, etcétera, deben acudir a Obras Públicas por el permiso. La ciudad en su equipamiento, incluyendo árboles, palmeras, jardineras, está llena de cartones-anuncios. Hace unas semanas la alcaldesa de Tijuana mandó colocar su carísima efigie para inundar la ciudad con sus “logros”. ¿Solicitaría el permiso?
Y los ahora llamados “desarrolladores”, esos que están llenando la ciudad de altas torres de oficinas o departamentos, son una chulada: invaden las banquetas, obligando al peatón que baje al arrollo exponiéndose a ser atropellado. Y con otra que arrojan el escombro a las banquetas o jardineras. A pesar de que el Artículo 22 ordena todo lo contrario. Y la autoridad mirando al cielo.
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Nota 1. Una buena: los trabajadores de limpia que les toca la playa en Playas de Tijuana, diariamente se afanan en recoger todas las inmundicias que dejan sus visitantes. Los cochinos merecen multa.
Nota 2. Los trapecistas de la política ya están brincando a Morena, por su hueso.
Nota 3. José Guadalupe Osuna Millán no necesita escribir un libro para ser un gran candidato a Senador.
Luz Elena Picos es directora de Red Social de Tijuana.
Correo electrónico: redsocialtijuana@hotmail.com www.lagacetaredsocial.org
