“Israel no es más que un furioso mastín del imperialismo yankee”.
-Enver Hoxha. Reflexiones Sobre Oriente Medio (1984).
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Nadie puede ser neutral en el conflicto palestino-israelí. Esa es una postura de hipócritas. “Neutralidad” no es otra cosa que cobardía. Significa estar de acuerdo con la barbarie y las masacres del régimen hebreo. Significa ser un lacayo de las hienas de Washington. Y punto.
¿A quién tratan de engañar esos vociferantes politicastros burgueses (de “izquierda” y de derecha) que hablan de paz, de reconciliación y de tratados internacionales, de intervención de la ONU?
Nosotros, los marxista-leninista-stalinistas, siempre estaremos del lado del heroico pueblo de Palestina. Y siempre combatiremos, por todos los medios posibles (no solo de palabra), al Estado israelí, feroz perro del imperialismo norteamericano.
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Para los revolucionarios de la clase obrera, los más grandes y peores terroristas son los chacales que anidan tras las sórdidas paredes de la Casa Blanca. Sólo quienes se tapan los ojos no mirarían esta realidad.
Atendamos: ¿Habrá persona en su sano juicio que tilde de “terroristas” a las fuerzas revolucionarias de Pancho Villa que atacaron Columbus, EU? Como podemos ver, hay de terroristas a terroristas.
De existir ya, en nuestra patria, un verdadero Partido Comunista de la Clase Obrera, ya a estas horas las reaccionarias embajadas, oficinas y empresas de Israel y de Estados Unidos estuvieran envueltas en llamas.
Israel es un engendro hitleriano.
Ningún sentimiento altruista ni religioso llevó al sionismo y a la reacción internacional, en 1948, a arrebatarles su suelo patrio a los palestinos para crear el Estado fascista israelí. Su objetivo central fue crear una cabeza de puente para tener al mundo árabe en un puño y apropiarse de sus riquezas naturales, sobre todo de su petróleo.
Nosotros siempre apoyaremos la causa del valeroso pueblo Palestino, y en todo momento, y, en toda situación arremeteremos con firmeza contra el Estado judío y sus amos, los rabiosos imperialistas de Wall Street.
El pueblo Palestino vencerá, sin duda alguna. Porque un pueblo que lucha con tanto tesón y fe en el triunfo de su causa, que ha combatido por tanto tiempo y con tantos sacrificios, contra viento y marea, es un pueblo que triunfa. Triunfarán como el pueblo de Vietnam.
La miserable socialdemocracia y los revisionistas haciendo mancuerna guardan silencio. Nada de movilizar a sus “fuerzas vivas” para denunciar y manifestarse contra el rabioso perro israelí. Mucho menos atacar los intereses económicos y políticos que tiene Israel en varios países.
La mayoría de los “Socialistas del Siglo XXI” ni tan siquiera algunas tibias palabras de reprobación se han atrevido a espetarle al mastín de marras. ¿No es tal cosa complicidad tacita con los matones judíos?
Israel es el Estado que cuenta con el ejército más moderno, numeroso y mejor armado en Medio Oriente. Es el único en esa área (en Medio Oriente) que posee la bomba atómica. Todo su cuantioso arsenal bélico le ha sido proporcionado por Estados Unidos
El Estado judío es una pistola al cinto de la reacción sionista internacional en general y de Washington en particular. Pistola con la cual mantiene amenazados a algunos y arrodillados a otros de los países árabes; pero sobre todo manteniendo encarceladas tras barrotes de acero, en Gaza y Cisjordania, a las masas palestinas.
Un verdadero revolucionario marxista-leninista no puede quedarse callado ante las atrocidades perpetradas por el régimen hebreo. Guardar silencio es darles alas a los alacranes.
Nosotros siempre estaremos del lado del valeroso y heroico pueblo de Palestina. Apoyaremos incondicionalmente la Resistencia de los pueblos árabes en general y al valeroso pueblo palestino en particular.
Y siempre, a los hitlerianos israelíes, los pondremos en la picota y los estigmatizaremos con fierro candente.
Que callen los cobardes, los sobornados ante la barbarie yankee-israelí. Los revolucionarios comunistas, nunca.
Atentamente,
Javier Antuna.
Correo: triunfocomunista@gmail.com
