Comentar sobre los problemas urbanos y sociales de alguna colonia o fraccionamiento, conduce a algún incumplido funcionario público. Son los encargados de que los asuntos de las comunidades marchen bien, en orden y apegándose a leyes y reglamentos. Cualquiera se puede identificar con esa queja, si recuerda todos los problemas que ha tenido que vencer en sus propios barrios o colonias.
Los esfuerzos, las campañas informativas que están obligando a los residentes del Fraccionamiento Playas de Tijuana para evitar que los constructores sigan levantando edificios en esa sobrecargada zona, son difíciles ante la indiferencia de las autoridades. Ignoran los trabajos del pasado; ellos no estaban en el gobierno, ni tampoco tenían interés en los problemas sociales de su ciudad. ¿Cómo hacerles entender que hay un Programa Parcial de Crecimiento de Playas de Tijuana 2008–2030?
Las autoridades que lo elaboraron para asegurar armónica planeación urbana, desarrollo ordenado y sustentable, tomaron en cuenta el potencial ecológico y del paisaje. El mismo documento menciona como principal objetivo, “prever las formas de crecimiento del núcleo urbano sobre la densificación y la expansión de la zona, para que la zona creciera racional y equitativamente”.
De haberse respetado ese programa 2008–2030, los que llegaron hace más de 60 años, hoy no estarían agotándose en convencer a las autoridades que cuiden su cumplimiento.
Altas torres de departamentos, en zonas inseguras, junto a la costa, docenas de casas en los cerros. Y la construcción de muchas otras más en la entrada del fraccionamiento, que no se ve por dónde puedan salir hacia la ciudad.
Incomprensible que los constructores sólo gusten de las zonas ya urbanizadas, colmadas de la demandas insatisfechas de servicios públicos como el agua, el drenaje, la luz y la movilidad de quienes llegaron primero. Si el fundo legal -decretado en 1940 por el presidente Lázaro Cárdenas- sigue siendo de 836 hectáreas, seguramente que hay muchos terrenos en espera de ser urbanizados, alejados de la zona central de Tijuana o de su costa.
Claro, tienen que invertir más en la introducción de servicios. Recibirán menos ganancias, pero no estarán perjudicando la vida de quienes llegaron primero, invirtieron y se esforzaron por cuidar su entorno. El caso de Playas no es el único, el problema lo tienen por todos rumbos de la ciudad. Vea usted la zona de Otay, sobrepoblada y conflictiva.
Nota 1. De nuevo Alexa Moreno, triunfadora en París, asegurando su presencia el 2024 en las Olimpiadas.
Nota 2. Adopte una mascota, no la compre.
Nota 3. Ver a un hombre o mujer deambulando semidesnudos por las calles, es una constante. ¿Quién se encarga de los enfermos mentales? ¿Qué autoridad los atiende?
Luz Elena Picos es directora de Red Social de Tijuana.
Correo electrónico: redsocialtijuana@hotmail.com www.lagacetaredsocial.com
