El transporte público de La Paz ha sido el escenario de múltiples agresiones sexuales: jóvenes mujeres han sido víctimas de tocamientos, roces o lenguaje obsceno, al utilizar las unidades. De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el primer trimestre del 2023 se registraron 255 ataques sexuales, entre abuso, acoso, violación y hostigamiento sexual.
Aunque no hay un dato exacto de cuántos incidentes ocurrieron en los traslados de este servicio desde el Ayuntamiento de La Paz, lanzaron un programa piloto entre el Instituto Municipal de la Mujer y la Dirección de Movilidad y Transporte de la Dirección de Seguridad y Tránsito de La Paz, que va contra el acoso sexual en el transporte público, tratando de reducir la violencia contra las mujeres relacionada con conductas, prácticas y diversas manifestaciones de connotación sexual, que incluye miradas lascivas, sonidos, piropos, hasta tocamientos y roces.
Entre los reportes atendidos, resaltan atentados al pudor, hombres haciendo actos lascivos en unidades de transporte público, especialmente durante traslados largos, como la ruta Calafia, donde se desarrolló el programa piloto contra el acoso a finales del 2022.
“Hemos tenido informes, hemos atendido reportes de transporte público y nada; pues resulta que ya los bajaron cuadras atrás y cuando llegamos al camión, pues ya es difícil dar con ellos y las chicas o se bajaron o no quieren saber más por miedo al qué dirán”, añadió Roberto, agente de la Policía Municipal de La Paz.
VIOLADOR EN POTENCIA
La historia de María de los Ángeles “N” fue narrada por la propia víctima a ZETA. La joven salió del municipio de La Paz con dirección a Cabo San Lucas, municipio de Los Cabos, el pasado 1 de abril de 2023. Abordó la unidad 156 de Autotransportes Águila en la terminal del Malecón, a las 15:00 horas, y jamás imaginó encontrarse contra un violador en potencia.
Mientras se trasladaba en el camión, a través de Airdrop – un método que permite la transferencia de archivos entre computadoras compatibles y dispositivos iOS a través de Wi-Fi y Bluetooth sin usar correo o un dispositivo de almacenamiento masivo-, recibió la fotografía de un miembro, acompañada de un teléfono y el nombre “Andrés”. La joven sintió terror al saber que viajaba en el mismo autobús que un agresor sexual.
Durante el trayecto, María de los Ángeles se contactó con sus amigos, y éstos a su vez se pusieron en contacto con las autoridades, quienes intentaron dar alcance al agresor sexual, en la terminal de Cabo San Lucas.
El camión hizo dos paradas, en Todos Santos y El Pescadero, ambas comunidades al sur de La Paz, y temía que el victimario hubiese bajado del camión, ya que no se conectaba a través de Airdrop.
“Estuve muy pendiente. Mis amigos me dieron valor a voltear a ver si alguno era sospechoso o cuidar que no se bajara, pero moría de miedo. Cuando vamos llegando a la terminal de Cabo, sentí mucho miedo y vi a los policías, en cierta manera descansé; los policías subieron y pidieron a todos los presentes no moverse, que bajarían todas las mujeres primero, fui la última en bajar y me quedé a observar en la búsqueda del dueño del celular y nada”, lamentó María de los Ángeles.
Las autoridades se entrevistaron con la víctima, pero no detectaron al agresor, allí se levantó el reporte.
Incluso, horas más tarde el agresor siguió, mandó otra foto pero por WhatsApp y preguntó si ella había mandado a los ministeriales, o sea que sí bajó en Cabo San Lucas y no pudo ser detectado.
“A mí me da la impresión de que esto ya lo ha hecho y no tiene miedo, y lo peor es que me preocupa es que otras mujeres hayan sido víctimas y quién sabe si las violó. Hay evidencia suficiente para que las autoridades actúen y lo detengan, antes que vuelva a atacar”, lanzó la víctima.
URGENTE ACTUALIZACIÓN DE TARIFAS
Recién fue publicado por la alcaldesa de La Paz, Milena Quiroga Romero, que se encontraba en la Ciudad de México analizando opciones para traer nuevas unidades de transporte público a la capital. El Ayuntamiento de La Paz pretende sacar de circulación ocho rutas de pasajeros y firmar contrato con una empresa de origen chino, la cual estaría en disposición de sumar unidades nuevas al servicio local a bajo costo.
Esta noticia no fue bien recibida por los concesionarios del transporte público. “Se fue la alcaldesa Milena Quiroga con un concesionario de Sitio Salvatierra, y nos preocupa a nosotros a los compañeros porque están haciendo las cosas a la espalda de varios concesionarios, se fueron hoy y están viendo los presupuestos sobre unos autobuses, la verdad no se da como debe de ser”, denunció Andrés Dávila, chofer de transporte público.
Los reportes de los prestadores del servicio son que el combustible subió más del 10% en el último mes, lo que merma sus ingresos totalmente; incluso señalan que la ganancia es ligera, apenas de 300 pesos al día.
Trabajadores argumentan que para cubrir gastos y terminar con una ganancia, su jornada puede ser de hasta 16 horas. Refieren que es necesaria la actualización de la tarifa para tener mejoras en el servicio. “Si es un chofer, sólo desde las 5:40 hasta las 8:00 de la noche; pero si son dos choferes, entra uno a las 5:00, a las 12:00 del mediodía y se lo entrega al otro chofer, y el otro chofer cierra el turno hasta las 8:00 de la noche, casi viene siendo 16, 8 horas cada uno que trabaja. Yo, en mi caso, pues a mí sí me rinde, porque yo trabajo todo el día para que así yo me pueda derivar de esos 250 pesos”, ejemplificó un conductor.
El Cabildo de Los Cabos autorizó el aumento de la tarifa de transporte público a partir del 20 de marzo, que en general llegó a los 16.00 pesos, mientras que los estudiantes, personas con discapacidad y adultos mayores pagan 8.00 pesos. Sin embargo, en la capital del estado la tarifa sigue siendo de 10.00 pesos, la misma que hace 12 años.
“Nosotros también tenemos que exigirles a las autoridades, pues ya que actualicen la tarifa, ya hace 12 años sin aumentar las tarifas, y estamos viendo que en Los Cabos, nomás se hizo la junta de Cabildo y a los dos días estaba autorizado el precio de 16 pesos, y eso que ellos tienen también unidades más cateaditas”, finalizó Dávila.
LOS CABOS: UNA BOMBA DE TIEMPO
En Los Cabos, por años se ha descuidado el transporte terrestre. Este servicio hoy se encuentra en crisis, con peleas campales por el pasaje y hasta choques.
Las denuncias ya incluyen abuso de autoridad y corrupción en contra de la Dirección de Transporte Estatal y Municipal por presuntamente recibir sobornos a cambio de la inacción contra las violaciones a la Ley, transporte que no cuenta con concesiones o personas legalmente en el país y que operan al amparo de la impunidad.
Este martes 25 de abril, transportistas se manifestaron en Palacio de Gobierno y en el mismo Congreso de Baja California Sur, exigiendo la salida del director de la Unidad de Transporte y Movilidad del estado, Martín Salinas Ceseña.
Decenas de transportistas acudieron y denunciaron que plataformas digitales no autorizadas están operando en Los Cabos, con unidades colectivas sin registro.
“Hay diferentes modalidades de transporte que no están previstas en la Ley, que no tienen permisos, que no tienen concesiones; inclusive algunas que ni siquiera en plataformas están, que no hay manera de ubicarlas. Están operando con placas particulares completamente de manera ilegal, entre ellos van extranjeros prestando el servicio y no hay registro”, denunció Benjamín Peña Curiel, representante de la Asociación de Empresas de Transportación Terrestre Turística Baja California Sur.
Mientras tanto, la Dirección de Transporte de Los Cabos sancionó y retiró unidades de las calles. Desde Transporte Estatal se pidió la liberación de las unidades, además de permitir el trabajo en la zona hotelera.
Señalan los transportistas que hay muchos intereses detrás del turismo cabello, más de parte de funcionarios públicos que protegen estos servicios de traslados patito.
“Se nota que hay en la Secretaría de Planeación Urbana, Infraestructura, Movilidad y Medio Ambiente un gran freno, exactamente en contra de la Dirección de Movilidad, y ése es motivo por el cual nos encontramos aquí, pidiendo que se destituya o se cese temporalmente del cargo al Director (de Transporte), ya que no está siendo una persona apta para nuestros intereses, responde a otros y está perjudicando al pueblo de Los Cabos y al turismo”, lanzó Peña Curiel.
Marbella González, Diputada local por Fuerza X México acusó que la ilegalidad del servicio de transporte es impulsada por hoteleros y agencias que buscan acaparar al turista, sin siquiera contar con los permisos mínimos.
“Muchos de estos hechos son impulsados por empleados del sector hotelero, agencias de viajes, tiempo compartido, así como empresas dedicadas a la operación de turismo y/o particulares sin permisos ni concesiones, que ven en la no aplicación de la Ley la oportunidad para operar en la total ilegalidad en demérito de quienes cumplen con la norma establecida”.
También es de mencionarse que el Congreso local no ha cumplido con una Ley de Movilidad que por años ha estado en la congeladora, y que el actual gobierno no ha manifestado interés de atender.
“La solución es un marco normativo actualizado que respete los derechos de todas las personas y que las autoridades hagan cumplir de manera justa e imparcial; la gente no quiere saber de culpables, quiere saber de soluciones”, manifestó Marbella González, diputada local.
USUARIOS SE QUEJAN
En Los Cabos está limitado el servicio, quieren cobrar altas tarifas sin atender las colonias de escasos recursos.
“No veo ninguna mejora, antes eran de los peores y hoy son los peores, de verdad que no tienen el más mínimo interés de brindar un buen servicio, ni siquiera cuidan cuantas personas van arriba o si caben más o no, suben uno tras otro y los camiones a tope, y ellos en el celular o peleando con otros camiones por el pasaje. En una ocasión se bajó el chofer y comenzó a pelear con un automovilista que se le atravesó, se sienten los reyes de la calle, y si vas cruzando la calle te echan el camión”, comentó Luis, usuario de transporte de Los Cabos.
El Cabildo de Los Cabos aprobó por unanimidad el aumento a la tarifa; no vigilan el cumplimiento de un buen servicio, que las unidades estén en buen estado, que no haya maltrato hacia el usuario y mucho menos que las rutas y horarios se respeten.
“Los horarios son un problema, cuando deben de pasar y en los puntos de parada no se respetan, pasan cuando quieren y aunque sea el último o el primero, si ellos van tarde no levantan a nadie, se van y nos dejan esperando otra hora más, al siguiente. Se paran en doble fila, te contestan enojados todo el tiempo, si ellos van atrasados se desquitan con el pasaje, apenas te subes y toman el pago del pasaje y arrancan, no dejan ni que te agarres o te sientes, todo por ir jugando carreras”.