No encontramos la salida, primero a nivel estatal, los comerciantes teníamos encima al ex gobernador Jaime Bonilla con sus cobros de agua y no sé qué tantas cosas inventaba para fregarse al empresario, al comerciante; luego llegó la pandemia y muchos no aguantaron, tuvieron que cerrar sus puertas. Cuando pensamos que nos estábamos recuperando levemente, viene precisamente el ahijado del ex gobernador Bonilla, hoy presidente municipal de Tecate, Darío Benítez, a querer aplicarnos multas de hasta sesenta mil pesos que no están sustentadas en el reglamento, en la Ley. Si nos negamos a pagar, nos envía a Reglamentos o Protección Civil a clausurarnos. Este gobierno nos está intimidando, nos está dando el tiro de gracia”, declaró a ZETA un comerciante tecatense que solicitó el anonimato.
Las denuncias de comerciantes arreciaron luego que el primer fin de semana de abril (7,8 y 9), inspectores identificados como adscritos a la Jefatura de Reglamentos arribaron a los comercios y llevaron a cabo la clausura de cinco de estos, alegando presuntamente que “no contaban con los permisos vigentes, si los teníamos, que no estaba a la vista, y si estaba a la vista, faltaban otros”, aseguraron los propietarios.
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A través de un comunicado, el gobierno municipal dio a conocer que en efecto ha arrancado un operativo para regularizar los establecimientos en los que prevalece la venta de alcohol:
“Tecate cuenta por primera vez con una ruta para regularizar negocios y, a través del operativo de supervisión de permisos de negocio, fueron clausurados establecimientos como Evolution, El Antídoto, Pedazo 84, así como dos sucursales de El Cajeme de Ayer por irregularidades en su manera de operar, hasta que se cumpla con lo establecido por Reglamentos Municipales”.
Manuel Cárdenas Rodríguez, secretario del Ayuntamiento de Tecate, manifestó que además de recaudar, este tipo de operativos ayudan a invertir este tipo de recursos en mejoras a servicios públicos.
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Ante el irregular proceder de las autoridades, comerciantes interpusieron una serie de denuncias ante la Sindicatura Municipal que encabeza Maythe Méndez Vélez, quien el13 de abril informó la suspensión cautelar de Francisco, encargado de despacho del Departamento de Reglamentos Municipales del XXIV Ayuntamiento de Tecate. Notificación que fue girada y aplicada por personal de la Subdirección de Responsabilidades, a fin de que continúe la investigación de los hechos señalados.
Siete comercios más se unieron a las filas de denuncias realizadas tanto de manera oficial como a través de redes sociales, en las que aseguran, les han solicitado el pago entre 30 mil y 60 mil pesos por parte de personal del gobierno municipal “para ayudarlos a regularizarse”, además de una tarifa mensual que ronda entre los 5 mil y 10 mil pesos para que puedan seguir funcionando sin molestias en lo que se expide el permiso correspondiente para la venta de alcoholes y las supervisiones de dependencias como Reglamentos, Protección al Ambiente y Protección Civil.
“De dónde se supone que vamos a sacar para pagar tanto, ellos nos aseguran que se realizó una modificación en la Ley, en la que se establecían 90 días para nosotros como establecimientos nos regularizarnos, pero nunca se nos notificó algo” comentaron los comerciantes, quienes acusan, los establecimientos revisados se seleccionan a interés personal.
La situación para los comerciantes se agrava, ya que la nueva propuesta que pretende aplicar la Secretaría de Seguridad Ciudadana que encabeza el General Leopoldo Tizoc Aguilar Durán en Baja California -reducir el horario extra de operación en bares, cantinas o antros-, de la que ha informado a Darío Benítez Ruiz, se unirá a esta estrategia.
“Ya se tuvo una reunión de trabajo con el General, coincidimos, lo que plantea en el tema de regularización de los antros, bares y discotecas tiene mucho sentido, hay una ascendencia en la que más-menos, en el caso de Tecate los delitos ocurren en un 14% entre once de la noche y siete de la mañana, horario en que están abiertos estos lugares, por eso estamos a disposición de unirnos a la estrategia”.
El miércoles 19 de abril, el gobierno municipal de Tecate sostuvo la primera mesa de trabajo con propietarios de establecimientos dedicados a ese giro, con el objetivo de brindar alternativas para que los establecimientos se regularicen.
Representantes de la Cámara de Comercio en Tecate aseguraron a ZETA que existe presión por parte del gobierno municipal a este tipo de establecimientos, aunque no difieren en su regularización: “No vemos como un mal actuar lo que está haciendo el gobierno municipal, lo que no vemos correcto es la forma en que lo está haciendo, está siendo agresivo y creemos que hemos apoyado lo suficiente e intentado trabajar de la mano con el actual gobierno como para que crea el presidente Benítez que es necesario usar este tipo de estrategias para que le dé resultados.
“Durante la realización de los llamados operativos de verificación, a muchos no nos respetaron la documentación con que contamos, nos citaron en las instalaciones de Palacio Municipal en un día que se encuentra cerrado para realizar el pago de lo que nos están solicitando, que ronda las 500 UMA (Unidades de Medida y Actualización)”, agregaron.
“Pedimos la documentación para en todo caso iniciar un proceso administrativo y no supieron qué decirnos los mismos inspectores, somos establecimientos formales, generamos empleo, somos patrones responsables, es inaceptable que el gobierno municipal recurra a esto para obtener recursos que espero sean para beneficio de la comunidad y no para la necesidad de recurso que se tiene previo al arranque de las campañas electorales, en las que según hemos escuchado, quieren volver a participar, pero olvidan que el pueblo tiene memoria”, manifestaron los propietarios.
Durante el inicio de la gestión de Darío Benítez, la clausura de comercios, empresas y otros giros a través de transmisiones en vivo con la presencia de funcionarios que encabezan las dependencias municipales en un mensaje de respaldo al presidente municipal, eran constantes, un estandarte para recibir el apoyo social. Benítez refería entonces la frase que persiste en sus discursos e incluso fue colocada en los camiones de basura recién adquiridos por el gobierno municipal, haciendo alusión al cobro a grandes deudores.
