El epicentro de las desapariciones forzadas en Mexicali, la Zona de Antros, se encuentra resguardada por un operativo realizado por elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE), motivado por la búsqueda de tres jóvenes desaparecidos, los cuales se unen a la lista de 7 más cuyo paradero se desconoce.
Ante la desesperación, un numeroso grupo de manifestantes irrumpió en el perímetro para ingresar al bar de Grupo Shots, donde realizaron algunos destrozos, para luego exigir justicia y permitirles ingresar -al menos a las madres-a observar la búsqueda.
Alrededor de las 8 de la noche arribó el dispositivo de policías investigadores encapuchados y con equipo táctico, los cuales “sacaron” a empleados y clientes que se encontraban al interior.
El operativo coincidió con una vigilia que familiares de desaparecidos agendaron este sábado 15 de abril, a las afueras de los bares pertenecientes a grupo Shots, ubicados sobre Francisco L. Montejano.
Lo que inició como una vigilia se convirtió en un operativo y finalmente en un jaloneo entre familiares de desaparecidos con policías investigadores, quienes intentaron impedir el ingreso de manifestantes.
El dolor se convirtió en rabia, pues ninguna autoridad se acercó a conversar con los colectivos en un primer momento, lo que generó el ingreso a la propiedad.
“¿Dónde estás, Marina del Pilar?” Fue el grito que se hacía acompañar por el cántico de “justicia”, pues -aseguraban- que los bares de la zona pertenecen a funcionarios del Estado y que por eso no hacían nada.
Algunos familiares lograron ingresar y realizar destrozos al interior, pero fueron ellos mismos quienes controlaron la situación, asegurando que no se trataba de causar desmanes, sino de buscar a sus desaparecidos.
La tensión continuó y se dio un acalorado intercambio de palabras entre policías y familiares, donde los segundos reclamaban el retraso en la atención de sus casos, pues desde el año pasado comenzaron a documentarse desapariciones.
Los padres de Joel Diarte Verduzco, reclamaron que desde septiembre su hijo esta desaparecido, y que ante la indolencia de la autoridad, solicitaron el apoyo del FBI, toda vez que el joven es ciudadano estadounidense, el cual sólo acudía a estos antros para divirtiese, pues no reside en México.
Agregó que días después de su desaparición, su tarjeta bancaria fue utilizada para comprar víveres y otros objetos, en la zona del Kilómetro 57, en la zona rural de este municipio y del Valle de San Luis Río Colorado.
A este caso se les suman los tres ocurridos el pasado 8 de abril, donde fueron desaparecidos tres jovenes:
Mauricio Verdugo Fragozo, David Alfonso Melesio Rodríguez y Jesús Manuel Bramasco Hernández. El primero de 22 años, y los otros dos de 23.