Una vez más la compañía de ventas y de distribución de boletos con operaciones en todo el mundo, Ticketmaster, vuelve a ser polémica debido a la desastrosa venta de entradas para el concierto de Bad Bunny el pasado viernes 9 de diciembre, en el Estadio Azteca de Ciudad de México. El nombre de la compañía se convirtió en tendencia a través de redes sociales debido a que miles de fanáticos del “Conejo Malo” se quedaron fuera del Coloso de Santa Úrsula a causa de la sobreventa y otras irregularidades con los tickets, por lo que Profeco anunció una sanción importante para la empresa, la cual sería hasta el 10 por ciento de las ventas en 2021.
“Lo van a tener que pagar y adicional van a ser multados, y la proporción de la multa está por determinarse la siguiente semana. Es una situación bastante grave, bastante delicada (…) Esta multa puede ser de hasta el 10 por ciento de las ventas del año pasado”, dijo el titular de la Profeco, Ricardo Sheffield, quien aseguró que han recibido más de mil 600 solicitudes de reembolso de personas que no pudieron ingresar al concierto del puertorriqueño.
Adicional, el funcionario desmintió a la empresa boletera web, la cual indicó que las entradas rechazadas previo a la presentación del cantante boricua eran falsas, ya que todas las localidades fueron emitidas por medio del servicio de la compañía, manifestando en que se hizo una sobreventa de dichas entradas, por lo que fue “una manera bien elegante de sobrevender. Eso es lo que hicieron, una sobreventa”, precisó en una entrevista radiofónica, alegando que es un tema por el cual Ticketmaster tiene que responder, haciendo el reembolso del 100 por ciento a las personas afectadas, más el 20 por ciento de indemnización.
El problema con Ticketmaster
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Desde hace varios meses la boletera ha venido enfrentado una serie de problemas en relación al pésimo manejo de boletos para conciertos internacionales, por lo que el Departamento de Justicia de Estados Unidos abrió una investigación por monopolio hacia la productora de eventos más grande del globo, Live Natión Entertainmet, la cual es dueña de las acciones de Ticketmaster, cayendo en una monopolización del mercado, perjudicando a la libre competencia en la industria musical y promotores más pequeños.
El destape de esta investigación se dio en relación con la venta de la gira “The Eras Tour” de Taylor Swift, la cual colapsó el sitio tras la alta demanda de tickets, haciendo que 2.4 millones de fanáticos de la cantante estadounidense se queden sin poder ver su espectáculo, resultando en una demanda colectiva por parte de fans hacia Ticketmaster por su mencionado fiasco, el cual recae en el dominio total de las disponibilidades de las localidades y accesos, lo que la convierte en la única empresa para conseguir boletos de manera oficial evitando la llamada reventa; esto recae en la falta de la libre competitividad y violación de las leyes antimonopolio en EE.UU.
